La Voz de Galicia
Navegar es necesario, vivir no es necesario (Pompeyo)
Seleccionar página

El grito de Wilhelm

 

Cuando veo los gráficos de la economía en los periódicos, con esas líneas descendentes que parece que se van a salir del papel, y sobre todo cuando escucho a los agoreros y a los profetas del apocalipsis, pienso que esta crisis me suena al alarido más famoso de la historia del cine, que no es el chillido de Tarzán, sino el el grito de Wilhelm, que nació con Tambores lejanos y se fue reproduciendo luego, película a película, en algunos de los títulos más celebrados del celuloide (véase la recopilación del vídeo).

A veces, ya digo, abro el periódico y escucho el grito de Wilhelm. Luego me calmo un poco, me pongo el abrigo (no tengo sombrero), abandono como Walser el cuarto de los escritos o de los espíritus y me echo a andar por la ciudad. Incluso, en algún momento de inesperado coraje, me atrevo a cruzar la … Seguir leyendo

Hikikomoris

psychony445.jpg 

Ya que andamos con V-M y su Dietario voluble, vamos a adentrarnos en el debate que propone este libro sobre los hikikomoris, esos jóvenes japoneses que renuncian a salir de su cuarto y se montan una vida paralela en el interior de la habitación, pertrechados, eso sí, con todo tipo de artilugios electrónicos. Hikikomori en japonés parece ser que significa aislamiento, que es lo que buscan estos adolescentes abrumados por ese Japón abrumador en el que habitan. Como Japón lo tiene todo, el rapaz se achica y se queda en los toriles, digo, en su cuarto.

Internet, claro, es el paraíso del hikikomori, porque brinda al introvertido chaval una ocasión única de asomarse al mundo, pero sin mancharse demasiado, limitándose a observarlo atrincherado en sus seudónimos desde la pantalla de un ordenador (portátil, claro, que el otro no cabe en la cama). El  hikikomori creo que nos mira a … Seguir leyendo

Cuento de Navidad

Qué mejor combinación que Harvey Keitel y William Hurt en pantalla, la música de Tom Waits (You’re innocent when you dream) y la prosa de Paul Auster para cerrar, con este cuento de Navidad de Augie Wren, esa gran película de Wayne Wang llamada Smoke. Felices fiestas y feliz 2009, incluso para los que no creen en los cuentos (ni siquiera en los cuentos de Navidad). Pero, como apunta Waits, al menos cuando soñamos somos inocentes.… Seguir leyendo

Sed de mal

Recuerda El lamento de Portnoy que se cumplen ahora cincuenta años del estreno de uno de los grandes largometrajes de la historia del cine: Sed de mal (Touch of Evil), film escrito, dirigido y protagonizado por el gigante Orson Welles a partir de una novela de Whit Masterson. Portnoy elogia, con tino, la escena del cuarto, donde Welles se aproxima como pocas veces a lo que es un diálogo en la vida real: nada de frases limpias que se alternan a golpe de guión, sino palabras que se entrecruzan, que se pisan, que se cortan y prosiguen dentro de un minucioso y realista caos. Tiene razón Portnoy al apuntar que el arranque de la película tal vez ha eclipsado al resto de la cinta, pero es que ese plano secuencia de tres minutos y medio es sencillamente prodigioso. La cámara de Welles se planta en medio de la vida … Seguir leyendo