Se nos ha ido, sin alardes, con la misma discreción con la que pasó sus 51 años sobre la Tierra, Ramiro Fonte. Nació en Pontedeume, uno de los lugares más hermosos del mundo, y nos ha dejado en Barcelona, otro de los puntos más condenadamente bellos de este planeta (y lo sé porque viví allí dos años, aunque de eso hace ya tiempo, como diría Ende, es otra historia y merece ser contada en otra ocasión). Y es que Ramiro era, sobre todas las cosas, un poeta, y sabía escoger sus lugares del mundo.
Hace tan sólo unos días el amigo y compañero Ramón Loureiro nos contaba en La Voz la publicación en la exquisita colección Esquío de una antología de su intensa obra, por la que había recibido en Ferrol hace también apenas unas semanas el premio Porto Magno. Como periodista, me tocó contar en La Voz que el ministro César Antonio Molina (otro enamorado del Eume) le había nombrado director del Instituto Cervantes en Lisboa, cargo desde el que se ha despedido de este escenario tan escasamente lírico al que, sin embargo, él siempre sabía encontrar su lado poético y mágico.
Lo siento por los suyos. Por nosotros, sus lectores. Por su gran amigo (y mío) Ramón Loureiro y, también, qué demonios, por esos versos que ya no escribirá y que ya no van a existir jamás porque sólo él podría haberlos escrito. Nos hemos quedado, amigos, un poco más solos.
Dejo aquí algunos enlaces:
Ramiro Fonte, poeta novísimo, por Jesús G. Maestro
Ramiro Fonte, premio Porto Magno
Ramiro Fonte en La Voz de la Escuela
Actualización (domingo 12, 11:00 horas): Enlazo el espléndido obituario que Ramón Loureiro dedica en La Voz al poeta eumés.
(Foto: Ramón Loureiro)
Leí esta mañana en La Voz el obituario de Ramón. Desde aquí un abrazo porque sé que perdió a uno de sus mejores amigos. No conocía personalmente a Ramiro Fonte, sí de vista como todos en Pontedeume, ese pueblo que él tenía por bandera. He leído que le tocarán la sintonía del «Paso» de Semana Santa en su despedida, eumés hasta la muerte. Nunca le agradeceremos lo suficiente ese retrato genial que hace en «Vidas da infancia» y aprovecho para parafreasear el último volumen que ya sonaba a despedida:
«¿E logo quen morreu? (preguntaba a xente pola rúa Real esta fin de semana) Ramiro Fonte, o maior poeta do Eume- dicían».
Estou segura que moitos aos que dedicou fermosas palabras neses tres libros agardarán por él cos brazos abertos «nas pontes do ceo».
Señora ou señorita L.F., un millón de grazas polas súas palabras, tan conmovedoras e magnificamente escritas.
Hai un Pontedeume que sen Ramiro non tería existido xamais.
fui su alumna.me enteré por la prensa y hasta hoy no me vi con ganas de averiguar porqué se había ido. «pasa un segredo» dedicado,un libro que leerán mis dos hijos, que sabrán que el fue mi mestre,que me enseñó mucho de poesia, pero también de la vida, y hasta de goles, aunque yo siga siendo del Madrid.
gracias Ramiro.
CUMIO DE RECORDOS
Unha fonte, unha fontiña,
que bota agua galega,
e que na ponte me achega
a aquela infancia tan miña.
Un poema que xurde aos teus pasos
e relouca no barrio de Alfama,
un fado que xa me chama
e me amostra un amor doutros anos.
Paises, cidades e citas,
cumios dos meus recordos,
homes, mulleres e vidas
que atomizan os meus sonos,
provocan miñas sorisas
e os delirios deste tolo.
16 de Febrero de 2005
“A Ramiro Fonte, Director del Instituto Cervantes de Lisboa”
Le envié este poema a Ramiro a Lisboa «no meu galego noxento».
Nunca supe si le llegó, pero no importa, era para él.
Gracias, Nuria y Pi&Phi. Es muy alentador que exactamente siete meses después de haber escrito este post sigan llegando comentarios. Un fuerte abrazo.