Vuelve Eurovisión a los papeles por un barullo con no sé qué estrafalario especimen televisivo. La misma Eurovisión, cielos, a la que enviamos en 1966 a Raphael y su demoledor Yo soy aquel, que tanto vale como himno friki o como versión carpetovetónica del My Way de Sinatra. Aquí lo cuelgo. Para los auténticos frikis, no para los usurpadores y plagiarios del arte del frikismo, que confunden la extravagancia con la obscenidad, o sea el culo con las témporas. Yo soy aquel, para los frikis fetén. Para los que lo son sin saberlo. Para los que lo son, pero no lo reconocen. Para los que querrían serlo. Para los que lo son cada día un poco más. Para los que han dejado de serlo. Para los que algún día volverán a serlo. Y, sobre todo, para los vocacionales, para los que sacan pecho cuando la aburrida y obstinada normalidad trata de imponerse frente a su afán de originalidad. ¿Qué sería de nosotros sin frikis?
http://www.youtube.com/watch?v=HzeVGSNyf-0&feature=related
Hola Don Luís. Usted no me conoce pero soy asiduo lector de su blog. Lamento decirle que yo no soy friki, soy comercial de una fábrica de bombones, aunque si le digo la verdad a pesar de lo mucho que oigo hablar de ellos, no sé a lo que se dedican los frikis, aunque imagino que será algo relacionado con el mundo del artisteo, o sea, gente del mal vivir. Y no crea que soy un inculto, que un día Sánchez Dragó me dedicó un libro en El Corte Inglés de A Coruña, una lluviosa tarde de invierno de, hace ya tantos años que casi me averguenza confesarselos. Vine a la capital herculina a visitar a una mozuela de Alcorcon que servía en casa de unos acaudalados señores, militar de carrera él, y me quedé. Mi Puri me dió 5 hijos, de los cuales el mayor ya me es Ingeniero Técnico Agrícola. Siempre supe que llegaría alto. Los otros no nos quisieron estudiar, pero están magnificamente empleados. Ya me han dado, entre todos, entiendase, 13 nietos. Bueno,dado, dado, no. Nos los suelen dejar los fines de semanas cuando ellos van a bailar. Mi Puri disfruta mucho con ellos, sobre todo con Tonecho, que se pasa el día echandose pedorretas.
Bueno Sr. Pousa, encantado. Lamento no poder saludarlo personalmente. No obstante imagíneme como AQUEL, el del himno de Raphael. Saludos.
P.D. ¿Para friki hay qué estudiar?. Perdon, es que no viene en diccionario alguno.
Don Nano, muy oportuno su comentario. Todos llevamos un friki dentro, aunque algunos incluso lo llevan por fuera. En mi profesión, por ejemplo, florecen como las setas, dicho sea con todo el respeto para las setas.
Un fuerte abrazo.
Ocurre una cosa interesante Luis. Todo depende del punto de vista desde dónde se mire. Me explico. Tengo una buena amiga caboverdiana que, mientras en Europa suspiramos los vientos por esa artistaza llamada Cesárea Évora, a la cuál, además, catalogamos dentro de ese sello absurdo de la World Music, a ella le provoca espasmos y arcadas incotrolables. ¿Por qué?. Porque en Cabo Verde es una artista a la que escuchan las personas mayores y de pueblo, o sea, lo que toda la vida se ha considerado como cosa de carcas y paletos, y, por Dios, eso nunca. Una horterada sideral vamos. Pero, amigo, pierde literalmente los papeles por el pasodoble -un ritmo que desconocía en su país- y esa estrella planetaria llamada Manolo Escobar¡¡¡¡¡¡¡¡. que, para ella, debe de ser lo más de lo más de la susodicha World Music.
Por tanto, tengo un cacao importante sobre qué es friki y qué no.
Saludos.
P.D: Saludos también a Nano
Totalmente de acuerdo contigo, Aal. El frikismo es una cuestión de perspectiva. Pero que conste que soy un fan de los frikis, de los entrañables, y no de los que quieren vivir del cuento. En su tiempo, por ejemplo, supongo que Sócrates o Platón serían unos frikis tremendos, que andaban por ahí filosofando mientras los demás curraban para ganarse el pan. Pero yo siempre apuesto por lo que se sale del guión, que es lo que puede marcar las diferencias. Sin frikis, esto sería la guerra de los clones, ¿no? Un abrazo para Aal y, otro para Nano y su larga familia.
Hombre «Aal», cuanto tiempo. Muchos saludos. Siempre tenemos que saludarnos con Luís o Ernesto de carabinas. A ver si un día podemos hablar fuera de la red.
Pues Luis, yo creo que hasta en cuestión de frikis hay clases, y si flipar con Raphael y su «Yo soy aquel» es ser friki, yo lo soy y de primera división. Como bien dices, «demoledor». Eso es un artista y el tal John Cobra no es más que una cucaracha a su lado…
PD. Pido perdón a las cucarachas que puedan haberse sentido ofendidas.
Javier, por supuesto, hay frikis y frikis. Yo soy de los frikis de Raphael. El Cobra yo creo que ni siquiera es un friki, sino otra cosa (en el sentido más peyorativo del término cosa). Un abrazo!
Bueno, bueno, aquí hay mucho friki de Raphael pero nadie ha mencionado todavía la verdadera Biblia-raphaeliana del frikismo: su versión de «Aquarius» («Acuerrioooos», en realidad), y la no menor «El indio», piedras angulares, sancta santórum ineludible…
Abrazos.
Tomo nota, amigo, para la próxima entrega de Frikilandia. Porque seguro que habrá más. Un fuerte abrazo!