La Voz de Galicia
Escritos de Galicia y resto del planeta
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El último tramo salvaje de A Mariña

Morás. Ayer me ha dado por ahí y me llegué a Morás, esa pequeña aldea de A Mariña lucense con sencilla y bonita iglesia, y famosa porque de su puerto salían sus bravos hombres buscando ballenas cuando las ballenas no eran especies protegidas porque abundaban Cantábrico adelante. Siempre le tuve cariño a Morás y mucho respeto al gran islote cercano, Ansarón (Sara Carreira, coordinadora de Al Sol en este periódico, me llama para preguntarme si se dice Ansarón o Sarón. Pues de ambas maneras, e incluso en la bibliografía aparece con los plurales). Me da la vena literaria y escribí la pequeña ruta que hice y que hoy publico en Al Sol (de ahí la llamada de Sara, siempre preocupada porque las cosas salgan exactas y correctas). Se trata del último trozo más o menos salvaje (entre comillas, claro) que queda en esa zona norteña de Lugo, … Seguir leyendo

La parte bonita de Vilalba

Vilalba. ¡Qué diferencia con la de Ribadeo! Uno entra en la oficina de turismo de Vilalba (algo apartada del centro, por cierto) y al oír las palabras «Camiño Norte» una mujer joven rápidamente vende el producto, facilita un interesante mapa de por dónde va el itinerario, da otro más genérico de los Caminos de Santiago en Galicia y asegura que todo está señalizado, lo cual prácticamente es cierto.

Vilalba ha sido desgraciada por un urbanismo digno del catálogo de los horrores, pero algo se ha recuperado en su casco histórico, que se ve más que decente, con su firme imitando antiguo, su parador y su iglesia puesta bajo la advocación de la Virgen María. La asignatura pendiente es prohibir -así, sin más- la entrada de coches en ese reciento histórico. Luego hay aspectos menores (algún solar necesita una urgente limpieza), pero eso ya son obras que dependen más … Seguir leyendo

Ante la ermita de San Guillermo, en Fisterra

Fisterra. No hace buen día, no, por el occidente gallego. Pero es lo que hay, y cualquier cosa excepto encerrarse en casa. Me he llegado aquí a echar un vistazo a varias cosas, entre ellas la ermita de San Guillermo, en el monte homónimo que es donde se alza el faro. La ermita ha sido excavada por la arqueóloga Lorena Vidal, y se están encontrando cosas interesantes (olvídense los inexistentes tesoros). Pero lo que me trajo aquí, en realidad, es un libro de curioso formato titulado Atlas arqueolóxico de Galicia. Comarca de Fisterra editado este mismo año por la Dirección Xeral de Patrimonio que ocupaba entonces, con el bipartito, Felipe Arias, un profesional realmente serio. La verdad es que el libro, de fácil comprensión para cualquier aficionado, constituye la muestra de lo mal, rematadamente mal, que lo hizo la Consellería de Cultura en lo que se refiere … Seguir leyendo

Muros, San Franciso y monte Louro

Muros. La villa de Muros es una de las pocas -si no la única- de Galicia que ha sabido conservar ejemplarmente su fachada marítima: una joya de granito. Sólo tiene un problema: dónde aparcar. Cierto es que el monte Orosa pone difícil encontrar o hacer una explanada como Dios manda (o sea, como tienen en los países civilizados del norte de Europa), pero o se busca ya una solución o aquello es imposible. Para los amigos de la historia, que sepan que allí comenzaba un Camino de Santiago secundario, e incluso a la salida de la villa se yergue un templo que lo recuerda.

San Francisco no está demasiado abarrotado. Se trata de un arenal muy agradable en donde, por suerte, parece que no se va a construir más. Y monte Louro he visto que se está regenerando muy bien después de la oleada de incendios de hace dos años, … Seguir leyendo

La iglesia de Trasmonte

Trasmonte (Oroso). «O sea, que fuiste al castro de Trasmonte y no a su iglesia». Las palabras me retumbaron en los oídos cargadas con sorna, así que no tuve más remedio que volver a subir al Land Rover y enfilar hacia Trasmonte por segunda vez en pocos días. Dejé el deteriorado castro local a la izquierda y continué por la derecha unos pocos cientos de metros hasta dar con el templo, impecable, mimado, con el cementerio afeándolo por un lado y la carballeira mutilada por… ¡otra pista de concentración parcelaria!, que deja el sencillo crucero con pousadoiro allá arriba aislado.

Pero la iglesia y su entorno son muy acogedores a pesar de eso. Es posible subir hasta el campanario desde el exterior, con evidente y prohibitivo riesgo para los menores, y contemplar una panorámica tranquila, verde, sin feísmo. Dos campanas sencillas y también en buen estado, como todas las tejas, … Seguir leyendo