La Voz de Galicia
Escritos de Galicia y resto del planeta
Seleccionar página

Hichinbroke. Pues me pillaron. La policía. O para ser más exactos, una mujer policía de paisano destacada desde Londres para controlar entradas y salida en los sitios donde se concentran muchos niños. Como en Barracudas, vamos.

A la funcionaria en cuestión -45, amable, firme, algo caótica tomando notas- le había extrañado que yo estuviera «25 minutes» (error, fueron 45) paseando por el aparcamiento a la entrada. En realidad, estaba esperando a una bilbaína que conocía ayer, y que a lo que se ve o bien hoy no llevó a sus hijos a Barracudas o bien yo llegué tarde.

Pero la agente tuvo a bien interrogarme por si yo estaba controlando entradas y salidas de niños, «if you are interested in children». O sea, y en román paladino, que debe de tener cara de pederasta.

El carné de prensa hace maravillas, de manera que hablamos más de 10 minutos relajadamente, ella preguntando y tomando notas que ahora mismo estará comprobando en su ordenador, supongo yo.

En fin, una experiencia. Pero al final quedé contento al saber que la policía vigila para que Martín esté seguro.