La Voz de Galicia
Escritos de Galicia y resto del planeta
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Billund (Dinamarca). Legoland (el verdadero, el danes) mejora a su hijo, el Legoland cercano a Londres. pero el concepto no deja de ser casi el mismo que en otros muchos parques del mundo (el desarrollado, claro) con los cuales comparte otra caracteristica: es caro, muy caro. Se trata de enlatar la diversion y facilitarla al maximo. Tan al maximo que con una espera de cuatro o cinco minutos ya esta garantizada. Excepcionales los artistas que simulan los devaneos amorosos en un castillo, mal como siempre la comida y ni una sola bandera pirata a la venta aunque haya una tienda donde es posible adquirir artigulugios piratas.

Sorprenden dos cosas. Una, que no haya mas referencias directas a Lego, a su historia, a su presencia en el mundo. Y otra, que el aeropuerto se halle literalmente pegado al aeropuerto, y los aviones, al despegar, pasen por encima de Legoland. Claro que las probabilidades de que una de ellas caiga sobre la concurrencia o explote en el aire son muy pequenas, pero alguna vez sucedio en la historia en otros parajes.

Toquemos madera… desde este ordenador sin tildes ni enes (la ene de Espana, claro).