Red Natura del río Tambre. Un lector, M. C., me manda un correo dando una de cal y otra de arena. Menos mal que yo, personalmente, no salgo demasiado mal parado, porque el enfado que encierra el hombre semeja descomunal.

Resulta que leyó mi post sobre la fervenza del río Toxa, cerca de Silleda. Y resulta también que el lector fue el mismo día que yo, aunque no coincidimos. Mi periplo transcurrió sin incidentes. El suyo, al parecer, no. «Cuando regresaba desde la catarata hacia el coche con mi mujer e hijo pequeño, un ruido atronador nos hizo poner en guardia -escribe-. Nos echamos a un lado y tres quads rugieron cuesta abajo. ¡Habían salvado la barrera que impide el paso y se lanzaron como si aquella fuese su propiedad!». Realmente, el comunicante tiene toda la razón: la barrera está para algo. Claro que muchos mastuerzos sólo entienden si se pone un vigilante con porra y pistola.

No hay derecho. El enclave es uno de los más bellos de Galicia. Los fanáticos del quad deberían respetarlo. ¿O es que están por encima de los demás?