Red Natura del río Tambre. Aquí, el que no corre vuela. Al menos eso es lo que debieron de haber pensado los vecinos de Corcubión que, en vista de que procesiones de Semana Santa por aquí, Festa do Encaixe por allá, se quedaron algo aislados. Y sacaron del armario (con perdón) una catapulta. Nada de solera, años e historia, sino un artilugio moderno que es attrezzo del mercado medieval que se celebrará en el mes de julio. Y en estos días el cacharro, cuyos constructores juran que funciona a la perfección y ojito con ponerse delante, se ha convertido en la atracción turística number one. Una maravilla, oiga.
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