«Si me pegan, que peguen, si me aciertan, me han dado, y si pierdo en la Rifa será porque he jugado…»
Permítanme recordar a la maestra Gloria Fuertes (Año nuevo) para agradecerles el ilusionarme un año más con este blog. Gracias a las miles de personas que, pásmense, siguen leyendo, comentando, discutiendo, criticando y difundiendo lo que por aquí aparece escrito.
Como decía en mi primer post, este intenta ser un blog en positivo sobre y para personas normales y corrientes que como decía Benedetti intentan “no quedarse inmóviles al borde del camino ni reservar del mundo sólo un rincón tranquilo”. Varias me han recomendado que comente cuales son los artículos más leídos en el 2015 como ya hice en el 2014. Aquí los tienen.
Posiblemente sea uno de los millones de personas que aún no han decidido su voto el próximo domingo. Tienen suerte.
Primero porque les van a dejar votar. No podrán hacerlo millones de personas, entre ellas las 80.000 incapacitadasinjustamente para hacerlo o el 95% de los residentes en el extranjero con derecho a voto, la mayoría jóvenes obligados a emigrar.
¿Todas? No, gracias a la campaña #Rescatamivoto, 3000 han encontrado un donante que votará en su nombre. El domingo votaré a quien Ainoa, desde Australia, me ha pedido (en un comentario de este post les cuenta su historia)
Pero también porque en estas elecciones hay muchas más opciones políticas entre las que elegir, más ganas de participar, de demandar cambios efectivos en la lucha por los derechos humanos, contra la desigualdad, la pobreza o la corrupción. Muchas de las 13.657.232 personas que en España están … Seguir leyendo
Si por algo me encanta tener este blog es por poder compartir iniciativas ilusionantes, impulsadas por personas que no se resignan y tratan de mejorar su entorno, rompiendo de paso con los prejuicios que se tienen sobre las personas inmigrantes por ejemplo, una bendición de la que por desgracia apenas podemos disfrutar en Galicia.
Hoy les dejo con Yosi Ledesma para que les presente MIGRANTES2015, una delicia de proyecto que durante este año y junto a muchas otras personas han llevado a cabo en A Coruña, relacionando con ingenio y escasos medios, arte, emoción y una lección de convivencia e integración entre culturas muy diferentes (no se pierdan los vídeos)
A Yosi ya la conocen, la semana pasada les animaba a votar en su nombre en las próximas elecciones. «El cambio empieza por nosotros» nos decía. Y ya ven como lo pone en práctica.
Pues parece ser que gallegos y canarios somos los que menos votamos en las anteriores elecciones generales. En 2011, en Galicia, nada menos que 704.999 personas tomaron la decisión política de abstenerse o de votar blanco o nulo. En toda España fueron nada menos que 10.361.756 personas las que dejaron que decidieran por ellas.
Me he enterado hoy gracias a una campaña viral puesta en marcha desde los Seminarios #Datactic3 que se han celebrado simultáneamente en Barcelona, Madrid y Bilbao con el objetivo de conseguir que más personas voten, que conozcan nuestro desigual sistema electoral y sobre todo que su voto sea lo más informado posible.
Si siguen este blog, ya sabrán que ante la burda excusa del «yo no voto porque todos son iguales» mi respuesta es siempre la misma: «iguales a ti«.
Hace unos días, en De cine, mujeres y futuro, les comentaba que muchas de las películas que he visto últimamente hablan de un futuro que pertenece a las mujeres pero sobre todo que ya no pertenece a los hombres, Que el tiempo de absurdas superioridades y machismos ha pasado y es obligatorio adaptarse y reeducarse para un mundo que si o si tiene que ser más decente.
No cambiar, resistirse, es ser cómplice de la violencia. Si, el tiempo de los orcos está acabando.
Vuelvo a Santiago feliz tras disfrutar en Valladolid de su gente y del buen cine que este año me han regalado en la SEMINCI que acaba de terminar. Lo hago en un tren semejante al que se estrelló en la curva de Angrois matando a 81 personas en circunstancias muy poco claras… Hasta ahora.
El documental Frankenstein 04155 recibió una merecida mención especial tras proyectarse en una sala abarrotada. Una obra de arte que con el rigor objetivo de la información oficial y la humanidad y autenticidad de los testimonios crea un auténtico fresco de la corrupción en España, de quienes la consienten o hasta intentan beneficiarse por razones políticas y de esa banalidad del malde quienes la toleran y miran para otro lado (en la administración publica, en RENFE, en la fiscalía o la judicatura…).