por Luis Pousa | Ago 11, 2010 | Columnas de La Voz de Galicia, General
Hasta hace un par de telediarios el cartel de hay lotería de Navidad te salía al paso a finales de agosto o principios de septiembre, como una especie de canguele ante la inminente derrota: las vacaciones agonizan y hay que confiar todo a las loterías, los cuponazos, el azar y la ludopatía para no tener que volver al tajo y al señor, sí, señor de la oficina. Será cosa de la maldita crisis o de que ya no sabemos esperar, cada cosa a su tiempo y los nabos en Adviento, se decía, pero ahora ni los nabos ni el Adviento tienen demasiados fans, y el cartelito de que se vende el número de la casa se adentra peligrosamente verano arriba, anticipándose tanto que dentro de un lustro lo van a colgar antes incluso del sorteo del año anterior. Sucede un poco como con esas tiendas que sacan los adornos navideños … Seguir leyendo
por Luis Pousa | Ago 10, 2010 | Columnas de La Voz de Galicia, General
El mesetario, de nombre científico Ejque ejque, viene en agosto a Galicia recién vacunado, como quien se va de safari a la sabana africana, solo que en vez de cazar leones y rinocerontes aquí el madriles se lía a tiros con los crustáceos. El centralista, como apuntaba Castelao, piensa que las nécoras ya salen coloradas del Atlántico, porque siempre que las ve están hervidas, sobre un plato y con su hojita de laurel. El capitalino también cree que en provincias estamos sin civilizar y trae unas pesetas en los bolsillos por si todavía, pobriños, no hemos entrado en la zona euro. Se siente un poco como aquellos viajeros británicos del siglo XVIII, que llegaban a este fin del mundo a lomos de una mula para ver si de verdad éramos tan pintorescos como en las láminas de las enciclopedias. El desencanto del mesetario llega, fulminante, cuando comprueba que … Seguir leyendo
por Luis Pousa | Ago 9, 2010 | Columnas de La Voz de Galicia, General
Otro de los trabajos forzados del verano es la arquitectura del paisaje, es decir, lo que antes de que nos volviésemos todos gilipollas, perdón, políticamente correctos, se llamaba jardinería. Eso que, en vez de un julay con dos másteres y tres idiomas hablados y escritos, practicaba Richi, el jardinero, siempre algo achispado el tío. En los chalés adosados no vive Richi, sino el paisajista cartesiano, que poda el seto con tiralíneas y planta los abetos con escuadra y cartabón. Pero en el ecosistema adosado también habita el vecino jipi, el que busca el orden del caos en las silveiras y cultiva su ferrado según los dogmas anarcosindicalistas, o sea, a su bola, a monte. Lo que mola es cuando el asilvestrado, al ver el césped algo tostado, pone a Led Zeppelin a tope en el cacharro y enciende el sistema de riego por abrasión, vamos, que mea largo y tendido … Seguir leyendo
por Luis Pousa | Ago 8, 2010 | Columnas de La Voz de Galicia, General
Chulopiscinas quiere ser como Cristiano Ronaldo, CR9 o CR7 o como se llame ahora, con su fijador en el pelo minuciosamente alborotado, su depilación láser integral y su tableteado de diseño en los abdominales. Chulopiscinas, esencia del verano celtíbero, domina el arte de pasearse por el borde de la charca marcando bíceps, e incluso tríceps, para asombro de las nenas, que en realidad no se asombran, sino que se parten el culo de risa con las poses automatizadas del atleta. Chulopiscinas, con el paquete de rubio americano en el elástico del bañador y la mirada castigadora perforando las gafas de sol, se machaca unas flexiones a pie de toalla, qué sé yo, quinientas o mil, solo para entrar en calor y sacar brillo a la musculatura delante de las churris, que matizan que el cachas a quien se parece no es a CR7, sino a Aznar, … Seguir leyendo
por Luis Pousa | Ago 7, 2010 | Columnas de La Voz de Galicia, General
A estas alturas de agosto, como vea un jirón de nubecilla en el horizonte, el yonqui de la melanina sufre el primer ataque de pánico, porque calcula que en las tres semanas y pico que le queda al mes no va a superar el tueste de pellejo del verano anterior y solo de pensar en volver a la oficina con esa tara sobre los lomos, como uno de esos pringados que en vacaciones se van por Europa a ver museos y piedras viejas, le entra un jamacuco que se rila por la pata abajo. El rostro torrefacto padece anorexia solar: mientras los demás le sugerimos que puede ir parando de torrarse, que el único blanco que le queda es el de los ojos y tal vez el de los huesos, el adicto al rayo UVA siempre se ve paliducho, desteñido, y por eso, en vez de gastar protector, se unta … Seguir leyendo