El señor Cangrejo, propietario de la hamburguesería submarina el Crustáceo Crujiente, no es un simple dibujo animado. Es un visionario de las fi nanzas al que solo la miopía nórdica niega obstinadamente el Nobel de Economía. Cangrejo tiene enmarcado el primer dólar que ganó en su vida y, muchos años antes de que Merkel y Rajoy tocasen a cuatro manos en la pianola del BOE la sonata de la reforma laboral, él ya había aplicado a Bob Esponja el contrato 0,0 soñado por los fans de Laponia: salario cero y vacaciones cero. Pero ni siquiera así el dócil bicho se salva de pisar la cola del paro de Fondo de Bikini. Ahora ha llegado otro señor Cangrejo, de corbata y coche oficial, que quiere fulminar a Bob, Calamardo, Patricio y, ya puestos, a todo Clan. Porque para ahorrar 204 millones de euros del presupuesto de CRTVE no hay que perder la perspectiva: si podemos liquidar el canal infantil, ¿para qué vamos a dejar de apoquinar a Anne Igartiburu y José Mota 5.000 euros por cada uva que se zampen en Nochevieja? Todavía hay prioridades.
Bienvenido, señor Cangrejo
por Luis Pousa | Mar 1, 2012 | Columnas de La Voz de Galicia, General | 0 Comentarios