Hace cuarenta años, Jimi Hendrix improvisaba en Woodstock esta fulminante versión de The Star Spangled Banner. No estaría mal que hoy sonase en el Capitolio para recibir al presidente número 44 de los Estados Unidos. Welcome Mr. Obama.
https://www.youtube.com/watch?v=R_nO0F4ugss
Hace ya más de un siglo, en el 98 como colofón a una guerra que comenzó con la ignonimia que supuso el hundimiento del Main y el alumbramiento de un estilo de manipulación que se dio en llamar prensa amarilla, aconteció la batalla de Santiago de Cuba. Allí perdieron la vida muchos valientes en una batalla naval desigual liderada dignamente por el Almirante Cervera, que consiguió salvar la honrra a pesar de la torpeza e ineptitud de la metrópoli. Nunca olvidaré cuando navegé entre aquellos restos con un nieto de un superviviente, mi amigo Pancho. Nuestras cañoneras fueron estrelladas voluntariamente contra la costa de Aserradero, después de que la moderna armada mandada por el Comodoro Schley Sampson hiciera prácticas de tiro contra nuestra flota. Nuestros marinos tenían como único recurso abalanzarse al enemigo con poco mas que el pecho desnudo y las carboneras vacías. La metáfora de aquellos herrumbrosos restos, significaba el final de un viejo imperio y el nacimiento de otro si cabe mas sutil y eficiente que habría de tomar el relevo de aquel ya caduco que presumía de reinar allí donde no se ponía el sol.
Aquel final supuso también el principio del pesimismo intelectual español, el odio antiamericano e incluso la destrucción de muchos iconos que desde entonces han puesto en duda incluso nuestra propia identidad nacional. En aquella expresión de “mas se perdió en Cuba “, explicábamos que quizás habíamos perdido nuestro orgullo patrio y esa perdida fue el germen de los movimientos nacionalistas que conocemos hoy en día.
He leído hoy a muchos intelectuales de larga tradición de izquierdas y tan profusa crítica a los americanos del norte, hablar ilusionados de esta toma de posesión. ¿ Podría suponer Obama una figura que no solo nos reconcilie con los E.E. U.U, sino con nosotros mismos? ¿El liderazgo mundial que le otorgamos no pone en evidencia la futilidad de las pequeñas batallas locales en la que frecuentemente nos enfrascamos?
Desde luego que es fulminante la versión. ¡Dejaría fulminado al propio Obama! Ya no hay contundencia en la música. Sólo el Boss les llega a los talones. Saludos.
Efectivamente, Guillermo, no han puesto la versión de Hendrix, qué se le va a hacer… Saludos
Prometeo, coincido contigo en que en España, y otros países europeos, subyace un antiamericanismo incomprensible (y también un cierto poso de antisemitismo), especialmente entre algunos sectores de la izquierda, que esperemos que Mr. Obama contribuya a enmendar. Yo creo que, aunque no habrá milagros, el nuevo presidente de los USA por lo menos aportará algo de ilusión y confianza ante un panorama internacional ciertamente descorazonador. Un abrazo.
Hendrix era único!!!
Viví varios años en Chicago y creo conocer un poco, sólo un poco a la sociedad norteamericana. Me parece un exceso el tratamiento dado en la medios españoles, pero personalmente estoy más que contenta con que Obama esté donde hoy está.
Eso no impide que critique al gobierno de los EEUU, lo que no significa que sea antiamericana. Quisiera a estar horas de la vida no tener que dar mucha explicaciones sobre esto.
Se puede ser israelí y detestar al gobierno de Israel, se puede amar EEUU y denunciar su política. Es así de simple en mi opinión.
Pero bueno, que yo venía por aquí para decir.
VIVA EL HENDRIX!!!
Kisses
M
El antisemitismo europeo que mencionas sólo responde a la objetividad de la historia. El estado de Israel es un estado que literalmente se lo sacaron de la manga tras la segunda guerra mundial. Se basaron en que antaño pertenecía a ellos y que por ello tenían derecho a partir el terrirorio palestino en dos. Territorio en el que no hay que olvidar, ya vivía gente. Aceptarías tú a un desconocido en tu casa porque diga que él era el antiguo propietario?
Ademas, no hay que olvidar el expansionismo de Israel desde ese terrorífico 1948, fecha en la que empezó a gestarse lo que hoy se llama terrorismo islamista, un legado que sin duda tenemos que agradecer a estados como Israel, con el apoyo explícito de la clase política y económica de EEUU (casi nada). Ahora palestina es el mayor gueto de la historia, mayor que los guetos de los judíos durante el nazismo, rodeado por un muro de hormigón y donde sólo se permiten entrar medicamentos, alimentos y personas cuando Israel lo dicta.
Tenemos que pararnos a pensar si el que una persona se ponga una bomba en el cuerpo no es en parte un signo de desesperación ante una injusticia. Desde luego Israel quedará para la historia.
Por otro lado viva HendriX y viva el legado cultural de EEUU jajaja.
Yo no comparto el entusiasmo generalizado por la llegada de Obama. Aunque, es verdad, pocas veces he deseado tanto equivocarme y no ser tan cenizo. Pero la experiencia no nos da muchos argumentos para pensar, aunque el corazón nos dé demasiados, me parece, para creer.
Hendrix, inmenso.
Pero sobre el sentimiento antiamericano, yo no lo veo tan incomprensible. Alguien ha puesto el ejemplo del Maine. Estados Unidos es muchas cosas, y el Maine, Man-Lai, el napalm, los escuadrones de la muerte, el golpe militar en Chile y otras muchas cosas también lo son. Yo no soy ni proamericano ni antiamericano, pero creo que hay que señalar la incongruencia y la contradicción, valorar objetivamente lo que nos da el liderazgo de Estados Unidos y lo que nos quita. Y mientras por un lado nos da democracia, un tanto sui generis, y libertad, por otro lado nos la quita.
Un abrazo.
Marta y 39 escalones, por supuesto que se puede criticar a Estados Unidos e Israel sin ser antiamericano o antisemita, obviamente no era eso lo que yo quería decir, aunque tal vez no conseguí explicarme. Sólo apunto que aprecio en ciertos países europeos, como España o Francia, por ejemplo, algunos posos del pasado que se venden como progresismo o modernidad cuando simplemente son eso, atavismos que se remontan, por ejemplo, a 1898 e incluso más allá. Luego, claro, la crítica siempre es saludable, e incluso diría yo que es imprescindible. Bueno, al menos coincidimos en la grandeza de Hendrix y su solo de guitarra. Un fuerte abrazo y gracias por vuestros comentarios.
Sergius, matices históricos al margen, yo creo que no hay justificación alguna en que alguien se ponga un cinturón con explosivos ni en que se comparen dos situaciones incomparables, como lo que hizo el nazismo y lo que hace el Estado de Israel (una coletilla muy de moda hoy en día, las víctimas se convierten en verdugos, etc…). El horror del Holocausto no estuvo sólo en una cuestión numérica (Stalin se cargó a 20 millones de personas, 14 más que los nazis), sino en la planificada operación de exterminar con métodos industriales a seis millones de personas no para aferrarse al poder (como hizo Stalin), ni para ganar una guerra (como hacen todos los contendientes en cualquier guerra), sino por el puro deseo (¿o incluso placer?) de aniquilar una raza. El nazismo fue una forma del mal hasta entonces desconocida sobre el planeta Tierra y que hasta la fecha, que yo sepa, nadie ha vuelto a practicar.
Lo de «jajaja» no sé si es por Hendrix o por el legado cultural americano. Hombre, supongo que no te estarás riendo de la aportación de gente como Frank Lloyd Wright, Mark Twain, Orson Welles, Saul Bellow, Philip Roth, etcétera… que algo han contribuido, digo yo, a que nuestro paso por este planeta sea un poco más llevadero. Saludos cordiales.
Yo amo la música y la historia de EEUU, amo el blues especialmente y me encanta que un descendiente directo de un Keniano esté de presidente. Sin entrar en detalles sobre sus ideas, que seguramente sean más conservadoras de lo que los medios pretenden hacernos ver, creo que lo que ha conseguido ya es mucho más grande que lo que pueda hacer después. Es el fin oficial de 100 años de esclavitud y 100 de segregación en el país que presumía de libertad e igualdad (sin entrar en detalles de cómo viven los negros ahora en el sur).
Lo que pasa es que me hace gracia cuando veo una cabeza cuadrada que no es capaz de ver que todo lo que en Oriente Medio está pasando es fruto de la actitud de occidente desde el final de la segunda guerra mundial.
Hola, Sergius. Aquí el cabeza cuadrada. Ya puedes comprobar que, a pesar de mi cráneo cuadrado, tengo la suficiente mandíbula como para publicar comentarios amistosos como este. Es obvio que Occidente ha tenido, y tiene, una enorme responsabilidad en lo que sucede en Oriente Medio. Ok. Pero, digo yo, algo de responsabilidad tendrán también los habitantes de la zona, ¿no? Sostener lo contrario me suena a esa excusa de los que en la dictadura le echaban la culpa a americanos, ingleses, franceses… de que Franco siguiera en el poder. Insisto en que Israel ha actuado ahora de forma desproporcionada, cruel e injusta en Gaza, pero no comparto esa visión angelical de los terroristas de Hamás ni comparto, en absoluto, las injustas, desproporcionadas y crueles comparaciones entre el régimen nazi y el Estado de Israel. Saludos cordiales.