La Voz de Galicia
Escritos de Galicia y resto del planeta
Seleccionar página

Porto de Bares. En Porto de Bares hay tres sitios para comer. Elijo A Muller Mariña, donde jamás había entrado. Hay algo que me tiraba y tira para atrás: abre sus puertas justo en el borde de una pista polideportiva, ese suelo verde que se ve en las fotos, y si a mí o a Perico de los Palotes nos da por jugar un partido, no hay quien pueda evitarlo, y ello no debe ser muy cómodo cuando uno está reponiendo fuerzas.

Comimos realmente bien y, de saber cómo iba la cosa, hubiéramos pedido algo menos. Nos llamó la atención los platos, que personalmente me parecen horrorosos aunque valoro de forma positiva el hecho de querer tener unas señas de identidad propias.

Me dio la impresión de que la cocina no lograba seguir el ritmo de la llegada de abundante clientela, aunque nosotros no tuvimos ni el mínimo problema. Precios medios tirando a bajos y, en algún plato, bajos. Raciones medias tirando a grandes excepto en la merluza, que era normal (por cierto, riquísima; las patatas, excelentes, requerirían un poco más de calor). ¿Amabilidad? A raudales.