La Voz de Galicia
Escritos de Galicia y resto del planeta
Seleccionar página

m1

Red Natura del río Tambre. El sector turístico, aquí y todo el mundo, está acostumbrado a los halagos. Recuerdo en una ocasión que fui a Gales, invitado, y una de las cosas que escribí sobre un espectáculo supuestamente medieval en el castillo de Cardiff era muy crítica. Una payasada. Desde Madrid les faltó tiempo para llamarme sorprendidos por haberme atrevido a publicar aquello. Y, en fin, hay muchas más anécdotas.

Estos últimos seis días he hecho otras tantas propuestas para esta Semana Santa en la que a día de hoy sigue brillando el sol. Ahora quiero dejar negro sobre blanco los nombres de lugares a los que, hágame caso, no vaya.

1/ La costa de A Illa de Arousa, excepto O Carreirón. Cierto: la basura no la arrojan los vecinos, sino el mar. Cierto también: los jóvenes dan ejemplo a los mayores y han organizado grupos para denunciar dónde se acumula la basura que alguien tira al mar y este lleva a A Illa. Pero no tengo noticias de que los voluntarios (¿dónde están los vecinos, sobre todo los que viven del turismo?) hayan organizando cuadrillas de limpieza. «Que o concello mande unha brigada ou que pague a Xunta». No vaya.

m1

2/ El paseo fluvial de Cambre. Hecho con esas subvenciones que caen del cielo. Ancho, bonito río al lado y fábricas por doquier. El paisaje es todo menos grato. No vaya.

m1

3/ Iglesia rural de Palio en Lalín, una de las joyas prerrománicas gallegas, en estado lamentable. No vaya.

m1

4/ La ruta de senderismo que parte del paseo de Leiro y llega a Ribadavia, más o menos vecina del río Avia y en muchos lugares paralela a la carretera y carente de interés alguno. No vaya.

m1

 

5/ El casco urbano de Malpica, un ejemplo de cómo demoler estéticamente una villa marinera, sobre todo por la parte de su paseo (en la foto). No vaya.

m1