Ferreirós de Abaixo (O Courel). O Courel tiene, sin duda alguna, el conjunto de las mejores rutas de senderismo de Galicia. Por lo general están bien señalizadas, con algún punto que despista y que hay que corregir puesto que un desvío en estas montañas es aparecer por O Incio o Samos adelante en vez de por las riberas del Lor. Y las rutas exigen cuidado, atención, mimos, constancia. No vale limpiarlas un día y adiós. ¿Eso exige esfuerzo? Pues adelante.
Soy testigo de que hasta hace dos veranos los itinerarios estaban bien. Quejarse era síntoma de vicio. Y soy testigo también de que ahora mismo han empeorado.
No, no me vale en absoluto que alguien me diga que el verano aún no ha llegado y el invierno ha sido generoso en lluvias. Y no me vale porque ya ha pasado la Semana Santa, que es el primer test anual. Y quien haya ido en Semana Santa a la ruta número 2 (Sequeiros de Mostad), como hice yo hace unas horas, se habrá encontrado con un árbol caído y evitando el paso (en la foto superior). Gracias a que Martín es ágil y que en mi caso el que tuvo retuvo, pasamos. La ruta 5 necesita una señal para no perderse a la salida del castro de A Torre cuando llega al asfalto, como me ocurrió a mí. Y así aparecí en una ruta sin nombre pero que parte del castro y lleva a una fervenza. Rematé en el precioso Ponte do Porto, pero desde la alvariza (foto inferior, y ya se ve al fondo que el camino está tupido) hasta ahí, algo más de un kilómetro, aquello es una selva, y cuando de verdad arranque la primavera no habrá santo que pase. Yo, desde luego, no.
Que los tiempos son malos lo sabe hasta el más iletrado. Y que lo peor que se puede hacer es abandonar y meterse en el caparazón, también. De modo que en O Courel el o los responsables de la limpieza de las rutas tienen que espabilar. Por cierto, ¿tiene algo que ver la que llaman por aquellos pagos «a alcaldesa ausente», que, según dicen, reside a kilómetros del municipio?