Red Natura del río Tambre. No conozco a Inés Abril y no he comido nunca en Maruja Limón, donde ella trabaja. La mujer se ha convertido a sus 27 años en la campeona gallega de cocineros y hoy se bate el cobre en Madrid con el resto de los representantes de España. Hoy también La Voz de Galicia publica una entrevista con ella firmada por Javier Armesto. La entrevista es muy correcta, pero eso no es lo interesante, sino que Inés Abril pone, quizás sin quererlo, los límites a la cocina que se puede hacer aquí y ahora. No descubre América para nada, pero resulta reconfortante oír de una campeona que «la cocina tradicional es la base de todo. A partir de ahí puedes ir creando y dándoles toques personales a los platos… ¿Qué nos diferencia de otros restaurantes tradicionales? Pues la puesta en el plato y que aplicamos nuevas tecnologías, conseguimos unos puntos en los pescados y en las carnes superexactos». O sea, nada nuevo bajo el sol. Pero es que eso es lo que hay: la magia es el papel que envuelve el regalo.