Jeremy Irons lo dice muy claro:  “Estoy loco de rabia y no voy a dejar que mil millones de personas pasen hambre”

Enfurecerse e indignarse es lo primero. El bueno de Jeremy, al que le tengo un cierto aprecio desde lo mal que lo pasé viendole sufrir por amor en Herida, de Louis Malle, ha participado en la campaña 1billionhungry.org, impulsada por la FAO y la Programa Mundial de Alimentos, dos instituciones de Naciones Unidas que tienen como objetivo la lucha contra el hambre.

Anímense a firmar (nada más, ni se les ocurra darles ni un euro!), serán uno más de los 3 millones que ya lo han hecho:

http://www.1billionhungry.org/xosecuns/

En la web, además de firmar, pueden ver algunas imágenes denigrantes que no deberían usarse en este tipo de campañas pero sobre todo obtener una información completa de la FAO sobre ¿Que es el hambre? y alguna más discutible sobre ¿Por qué hay hambre?.

Me quedo con el principio del párrafo: «La falta de alimentos no es el problema, hoy en día se producen suficientes en el mundo para que todos estuvieran bien alimentados y llevaran una vida sana y productiva» . El resto de causas que citan se me quedan algo escasas. Falta la principal: hay hambre porque se quiere y porque los alimentos son antes una mercancía que un derecho.

¿Que todo esto nos queda muy lejos?  Relean el artículo de Miguel A.Rodríguez en La Voz sobre la especulación con los precios de los alimentos o el de Carlos Manuel Sánchez en XLSemanal y a lo mejor cambian de opinión… pero anímense, son miles las iniciativas que en su barrio o en su pueblo y en todo el mundo, existen para luchar contra esta tragedia evitable. Si alguien quiere aquí abajo ya pueden hacerlo.