Antes da pandemia, a loita contra a pobreza, a exclusión social e a desigualdade semellaba estar moi lonxe de ser unha prioridade política e económica. No 2019, 11.875.000 persoas, o 25,3 % da poboación seguía en Risco de Pobreza ou Exclusión Social (AROPE). No 2008 o estaba o 23,8%. A pobreza infantil persistía nun 27,4%, aumentando a cifra do 2019, sobre todo a das nenas e mozas. Ter hoxe un fillo ou filla en España e en Galicia é un factor de empobrecemento.
O 9,2% da poboación, 4,29 millóns de persoas, vivía na pobreza severa (percibindo menos de 492€ ao mes un fogar dunha persoa ou 1034€ nun de dous adultos e dous menores, por exemplo). 880.000 persoas máis que no 2008.
Se acaba de aprobar el Ingreso Mínimo Vital (en adelante IMV), un instrumento reclamado desde hace años por las organizaciones de lucha contra la pobreza y semejante al que ya existe en la mayoría de países europeos. La emergencia de la crisis social causada por la pandemia del COVID19 ha obligado a ponerla en marcha en pocos meses con una escasa y confusa información, lo que está causando muchas dudas sobre su alcance, presupuesto (cada nueva semana son 500 millones de euros menos que la anterior) y características finales.
Pocas veces hay que aplicarse lo de «mientras no salga en el BOE es propaganda» que nos enseña Eva Belmonte, la creadora del BOE nuestro de cada día y uno de mis referentes en estos meses de confinamiento e inseguridad jurídica (el otro es Santiago Míguez, de Algalia), pero como tengo la suerte de participar en la exitosa … Seguir leyendo
La heroicidad de miles de profesionales que estos meses luchan contra el coronavirus no puede ocultar las carencias de un sistema de sanidad pública débil tras años de maltrato político y presupuestario y de renuncia a una fiscalidad justa. La normalidad a la que queremos volver después del confinamiento y la pandemia ya no existe.
La pobreza enferma y va a seguir enfermando a millones de personas vulnerables si nuestra sanidad no se transforma. Empecemos entendiendo lo que son los «Determinantes Sociales de la Salud» con este vídeo y luego lean a Begoña Hermida, una experta en promover la salud en situaciones infinitamente más difíciles que la que ahora vivimos en España. Tras su trabajo en programas de cooperación en Angola, Congo, Mozambique o Senegal ahora dirige la Federación Gallega de Daño Cerebral.
Gracias, Begoña
De virus, aplausos, políticas públicas y mundo roto
Lo sentimos. Pero pretender luchar con una mínima garantía de éxito contra la pobreza y sus causas implica responder a la pregunta del título.
Asistencialismo o derechos y transformación social. ¿Por qué modelo opta usted? ¿Y la organización a la que dedica su tiempo o su dinero? ¿Y su parroquia o los servicios sociales de su ayuntamiento?
Una de las principales razones que están detrás del fracaso rotundo de muchas políticas y programas de inclusión social es no ser conscientes o pretender esconder esta toma de decisiones (ideológica y política) que se realiza de facto detrás de palabras quizá moribundas como ayudar (a los necesitados o desfavorecidos), solidaridad, caridad, compasión, apolíticismo…
Una aclaración. No vean ni un asomo de crítica a las personas que ante el desprecio del gobierno de turno, buscan dinero como sea para pagar costosos tratamientos a personas queridas, ni a las que dedican su tiempo … Seguir leyendo
«La inmigración es una bendición para los países que la reciben. Es natural y sobre todo es inevitable. La única solución es cambiar la mentalidad que está detrás del sistema actual de migraciones y tratar a los extranjeros como seres humanos y no como meros poseedores de un pasaporte«.
Una bendición, si. Verdades como esta de Gonzalo Fanjul u otras como que el problema no está en la inmigración sino en la desigualdad creciente, en la corrupción o que el fomento del odio a las personas migrantes es rentable políticamente apenas se escuchan, incluso pueden resultar provocadoras.
«…el caso es difamar y meter miedo. Fulano hace un poco, mengano hace otro poco y, cuando ocurre la desgracia que han provocado entre todos, ninguno se siente responsable porque, total, yo sólo pinté, yo sólo revelé donde vivía, yo sólo le dije unas palabras que igual ofenden, pero, oye, son solo palabras, ruidos momentáneos en el aire.«
La cita es de Patria, el libro de Fernando Aramburu que describe y emociona como pocos lo que fue el infierno del terrorismo etarra.
Y la foto la tomé hace unos meses en el antiguo campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau. Lo que más me horrorizó de esta visita no fue sólo ver las consecuencias del holocausto sino el minucioso sistema de humillación sistemática de las víctimas antes de matarlas. De como se recordaba desde años antes a personas judías, gitanas o con discapacidad el por qué se merecerían su muerte … Seguir leyendo