Art.14: Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social.
Art.41: Los poderes públicos mantendrán un régimen público de Seguridad Social para todos los ciudadanos que garantice la asistencia y prestaciones sociales suficientes ante situaciones de necesidad, especialmente, en caso de desempleo. La asistencia y prestaciones complementarias serán libres.
Quizá leyendo estos dos artículos de nuestra Constitución entiendan por qué a muchas personas que trabajan por los derechos, la inclusión social y la dignidad de las personas pobres o en exclusión social se les escapó más de una lágrima al leer el artículo Broches para ayudar a Dani. Empieza así:
«El pequeño coruñés padece una parálisis cerebral. Su tía Pilar pasa las noches fabricando broches a mano para costear con su venta los múltiples tratamientos«
Entiendanme bien. No vean ni un asomo de crítica a las cada vez más personas que buscan dinero como sea para pagar costosos tratamientos de seres queridos. Todo lo contrario: su lucha es casi heroica, como indignante que se vean obligados a ello porque el estado (central o autonómico) les insulte y no cumpla con su obligación constitucional.
Les dejo una respuesta que me emocionó, la de Pio y Paula, los padres de una niña paralítica cerebral impulsores de la página Queremos una Compostela sin barreras y a quienes ya conocen si siguen este blog.
Hoy, mientras desayunaba, leía con una lágrima asomando del ojo, la noticia de este niño que padece parálisis cerebral y que no puede disfrutar de las cosas que hacen el resto de niños normales ya que está postrado en una silla de ruedas, no puede hablar bien y tiene estrabismo! También me emocionaba con su familia que saca tiempo de sus horas de sueño para conseguir dinero para pagar esas terapias que logrará que Daniel sea un niño como los demás, un niño normal. Eso sí, sin perder nunca la sonrisa por que estos niños son tan alegres!!
Esto es lo que provoca la noticia, verdad? lástima, lágrimas, víctimismo, frustración, SEGREGACIÓN, INJUSTICIA, DISCRIMINACIÓN.
BASTA YA !!!!!! (y lo siento por esta familia que me sirve de conejillo de Indias): Hay que empezar a ACEPTAR Y RESPETAR A LAS PERSONAS EN SU DIVERSIDAD. Hay que unir fuerzas, tiempo y horas de sueño para luchar POR LO QUE ES NUESTRO (servicios de Atención Temprana, rehabilitación, asistencia personal, accesibilidad universal..)
Mi hija NO PADECE PARÁLISIS CEREBRAL: Es PARALÍTICA CEREBRAL. Es una de sus características, rasgo que define su forma de moverse, de hablar, de relacionarse, de hablar, de madurar, en definitiva de ser quién es.
Mi hija NO ESTÁ POSTRADA EN UNA SILLA DE RUEDAS, mi hija dispone de una herramienta que le permite desplazarse, relacionarse, jugar, interaccionar… ¿o es que acaso sólo hay una forma de hacerlo??
Mi hija no vocaliza bien pero usa un comunicador que le permite relacionarse y exponer sus ideas, sentimientos, opiniones. ¿o es que acaso sólo hay una forma de comunicarse?
Mi hija NO ES UNA VÍCTIMA no la victimicemos, mi hija ES FELIZ no sientas lástima, MI HIJA ES ASÍ Y ES PERFECTA!
Búsquense la vida. Es cosa suya
Estado de derecho, justicia social, respeto…palabras que día a día suenan más extrañas, porque lo cierto es que cada vez vemos más llamadas a nuestra solidaridad para solucionar problemas y tragedias personales. Lo que antes era una obligación del estado pagada con nuestros impuestos, ahora se nos dice que debemos buscarnos la vida y que si no lo hacemos allá nosotros. «Del estado del bienestar a una sociedad participativa«, decía hace poco el Rey de Holanda. O a la «sociedad del bienestar«, como le escuché hace unos años al hoy maestro del trampantojo, Artur Mas.
Insisto, a las personas que se están buscando la vida, nada que criticar, todo lo contrario. Ni a las organizaciones para quien estas actuaciones son, y así lo dicen publicamente, un medio, medidas de emergencia mientras siguen luchando por la dignidad, los derechos sociales y la inclusión de las personas. Pero es muy distinto, y en muchos casos hasta repugnante, ver como cada vez más organizaciones y medios de comunicación lo convierten en un fin en si mismo.
Hace unos meses en este blog, Luis Barreiro advertía de la vuelta a los años 70, al «todo para los pobres pero sin los pobres» a un asistencialismo muy rentable para ONG sin demasiados escrúpulos: inmediato, espectacular, simpático.
“La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respetuo mutuo.” dice Eduardo Galeano en este artículo de la ONG Diseño Social
Parece recochineo, pero el pasado 5 de setiembre fue el primer Dia Internacional de la beneficencia . Ese día Gonzalo Fanjul escribía «Apadrine mi operación de próstata«, ante la noticia de que algunas universidades españolas están buscando el ‘apadrinamiento’ de estudiantes para evitar que estos abandonen las clases.
La televisión pública italiana prepara el programa «The Mission»: una especie de «campamento de verano» con famosos en campos de refugiados en Congo, Sudán del Sur y Mali. Pornografía humanitaria con la colaboración del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR Italia)…
‘Entre Todos’, ¿un programa mezquino y cruel?
Es un debate complejo: ¿como hablar de derechos y justicia social, SIN OFENDER a las miles de personas que con una buena fe admirable buscan ayudar a UNO SOLO de sus semejantes? ¿Cuantos tapones hay que recoger para asegurar un futuro digno a los 12.741.434 españoles y españolas en pobreza o exclusión?
Este nuevo programa de TVE, es un buen ejemplo para el debate. «Es indigno e inmoral que nuestro dinero se dedique a programas como este donde se pide caridad para personas que deberían estar protegidas por ley, como son niños con enfermedades degenerativas, es decir, personas en situación de dependencia«, escriben desde la Plataforma en Defensa de la Ley de Dependencia en Castilla la Mancha. Les recomiendo que lean los críticos comentarios a este artículo.
Los y las trabajadoras sociales han rechazado participar en este programa, al considerar que contradice su Código Deontológico y promueve la sustitución de los derechos sociales por la caridad, sin respetar la dignidad de las personas. La Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales lo ha denunciado ante la Defensora del Pueblo por utilizar a menores para una mejor puesta en escena y para despertar la solidaridad y generosidad de los telespectadores.
¿Qué opinan?
Si quieren debatir sobre este y otros muchos temas relacionados con la lucha por una vida digna, les recomiendo que asistan al III Foro sobre pobreza, exclusión Social,Tercer Sector y Voluntariado que se celebra el 3 y 4 de octubre en Santiago de Compostela organizado por EAPN Galicia. Con un ambicioso y optimista programa donde más de 30 expertos insistirán en que «No es un gasto, es una inversión» .
Y no me resisto a acabar con optimismo, con la opinión de Raúl Gay y Pablo Echenique, los autores de uno de mis blogs favoritos, De retrones y hombres: Discapacitado y más feliz que tú…sí, que tú
@xosecuns
No nos pidan calma (en Facebook)
cada dia que pasa me gusta mas lo que escribes y la manera lúcida con que ves la situacion de Espana. Yo soy de un pais – Brasil – que hace el mundial mas caro de la historia y donde a los en situacion de exclusion se llama desamparados pues es lo que son: desamparados. Hay muchissimo voluntariado, pero todo es caridad. Te digo que esto me molestaba mucho porque dabas de comer pero la vida de nadie cambiaba por esto; desde siempre cuestionaba esto en los sitios que participaba: que nos metiamos en una favela con la cesta de la comida para decenas de personas, y volvíamos, y volviamos y nada, nunca ha cambiado. La gente seguia con hambre, sin salud, sin libros y sin derechos. Lo que todos me contestaban era que «quien tiene hambre, tiene prisa» que es el slogan que una campana linda – por ser puntual – de no permitir que ninguna familia pase las navidades sin comida en su mesa.
Me da mucha esperanza al perceber que su lucidez es compartida.
Que delicia de comentario, Paula. Muchas gracias. Fíjate, el discurso de empoderamiento, derechos sociales, etc y en contra del asistencialismo y la beneficencia lo aprendí cuando trabajaba en cooperación al desarrollo y con múltiples ejemplos de participación ciudadana y de lucha por la dignidad y los derechos en muchos países de America Latina. Ahora ese debate lo estamos viviendo también aquí y tenemos la oportunidad de compartir formas de lucha y alternativas gracias a redes sociales y facilidades de comunicación. Brasil lo conozco mucho menos pero estoy seguro que no es una excepción.
El enemigo es muy fuerte, aparte de qeu hay un interés politico claro al impulsarlo, como decía Luis BArreiro, el asistencialismo es inmediato, ideal para redes sociales y televisiones, es sexi, simpático, hace aparecer como buenas personas a quienes lo practican. Y es tramposo, si te dejas te secuestra con sus argumentos, lo que tu dices «quien tiene hambre tiene prisa», ¿qué mala persona se puede oponer a esto? Hay que oponerse, creo que con la misma virulencia, enseñando no al niño que salvas del hambre, sino a los miles que estás condenando por no analizar ni luchar contra las razones de su pobreza. Como decía al final del post sobre el ultimo informe de la pobreza infantil de UNICEF ESPAÑA (por cierto ¿tiene el mismo enfoque de derechos el de UNICEF BRASIL? pregunta, pregunta)
«2.306.000 niños y niñas pobres. Podrían haber optado por pedir nuestra limosna para salvar a 6000 de ellos, conmoviendonos con imágenes sensibles, bocadillos mágicos, unas cuantas becas comedor o pintando monstruitos ridículos contra el hambre. No lo han hecho. Para mi eso se llama coherencia con una causa. ¿De que ONG se harán socios?»
Derechos siempre, pero los de todas y todos, los de los que buscan un bien común y los que defienden los suyos en particular. Está claro que mientras sigamos luchando por causas individuales nada cambiará y fomentar y premiar este tipo de iniciativas individuales interesa también a los que no quieren que nada cambie.
Por otro lado, aparte del derecho, está la responsabilidad de esas familias y yo puedo comprender que antes que la responsabilidad o justicia social esté la proteger, cuidar o salvar la vida de su hijo o de su propia familia.Me parece lógico, lícito y natural y me parece responsabilidad del resto de la población colaborar, sí pero… también lo es seguir luchando para que cualquier ciudadano, cualquiera de nosotros, en una situación de dificultad ( enfermedad , riesgo de exclución,etc) no se tenga que » buscar la vida solo» .
No podemos dejar que se siga destruyendo lo que queda del Estado de Bienestar mientras nos entretenemos ayudando y aplaudiendo iniciativas del todo lícitas, que nos hacen sentir que estamos colaborando, aportando nuestro granito de arena, pero que nos devuelven a un sistema de caridad.
gracias Xosé por entenderlo tan bien 😉
Gracias a los dos. Si lo pasé mal leyendo el artículo y vuestra respuesta, no quiero ni pensar lo que os debió doler a vosotros. Me sentía obligado a escribirlo. Y ahora tenemos un auténtico reto desde luego en muchas organizaciones, ¿como hablar de derechos y justicia social, SIN OFENDER a las miles de personas que con una buena fe admirable buscan ayudar a UNO SOLO de sus semejantes?
Yo lo tengo claro y lo vengo defendiendo desde hace tiempo, hay que bajar a la arena a pelear, mostrando y comunicando los miles de casos de personas que no víctimas, viendolo como algo natural y desde luego opuesto a un modelo asistencialista, pero hay mucho que cambiar y muchos miedos que vencer.
Seguimos. Un abrazo y gracias por vuestro ejemplo