Damien Jurado es,sí, otro-cantautor-folk-del-indie-americano. Y esa expresión genera en muchos, con razón, cierto cansancio. Pero, en esta ocasión. cabe hacer una significativa apreciación. Encaja en la categoría, pero tal y como lo hace Matt Ward, Bill Callahan o Bon Iver. Es decir, pertenece a la primera división, a los que van mucho más allá de recoger la lección de Nick Drake y girar en círculos sobre la eterna melancolía de una guitarra acústica. Una escucha de su último trabajo, el recién editado Maraqopa, servirá para cambiar la impresión a todo aquel que se acerque a él con el tópico metido entre ceja y ceja. Y desmotarlo totalmente

El álbum arranca vivo, exultante y psicodélico con las guitarras laberínticas de Nothing In the Newsy su sucesión de capas. Sigue en el relax acústico de un Life Away From the Garden con sorprendentes coros infantiles adornando su alma de Neil Young. Continúa con la titular Maraqopa, en un remanso de suavidad pop setentera. Y así durante siete temas más, dejando un catálogo de fotos tan sorprendente como conmovedor, uno de esos discos que se disfrutan de inicio a fin sin pestañear, con la respiración contenida y los oídos absorbiendo placer y más placer. De fondo, la idea que recoge el título: Maraqopa una ciudad que un día Jurado soñó formada por casas con forma de iglú y en el que las personas se comunican telepáticamente.

Será el eje del concierto que el domingo dará Jurado en Ourense. Allí se verá si logra reproducir toda la gama de matices de un disco riquísimo gracias a la producción de un Richard Swift maravilloso. Será una oportunidad única de disfrutar de uno de los grandes del momento que llega en su etapa más pop y serena. Abrazado a la religión (o más bien al mensaje y las enseñanzas de Jesús, tal y como puntualiza en la entrevista que publicará mañana La Voz), ha encontrado una paz y una espiritualidad que se traslada a una música balsámica y llena de pureza.

Damien Jurado ya estuvo en Ourense en un par de ocasiones. Fue en el 2009 y el 2010 dentro del ciclo American Autumn que organiza cada año el Café Pop Torgal para honrar a la música americana independiente. Ahora lo llevan a un escenario mayor, con varios músicos respaldándolo detrás, en una de las pocas fechas que da con ese formato en Europa. Promete ser lo más fiel posible al disco. Y eso es una fantástica noticia. Esperemos que el público corresponda al mimo y al cariño con el que se le trae.