(Todo esto viene a cuento de que hoy sábado 20 de diciembre en el Café Pop Torgal en Ourense tendrá lugar un homenaje a Sergio Algora, el ex cantante de El Niño Gusano, Muy Poca Gente y La Costa Brava, fallecido el pasado mes de julio)
En 1997 El Niño Gusano dieron un concierto en la extinta sala Salamandra de Ourense, territorio rockero donde los haya. Era su actuación número 100 y el grupo decidió salir disfrazado para celebrar la coincidencia. Pero a la gente no le hizo gracia. Ni los disfraces, ni la actitud festivs de los maños. Tampoco el sonido. El pop psicodélico y de reminiscencias sesenteras del grupo no gustó. “!Más caña, más caña!!, decía una chica entre un reducido público que apenas sobrepasaba a las 50 personas.
Los espacios entre canción y canción se hacían así cada vez más incómodos. Los pocos que habían pagado la entrada como fans del grupo veían como los boicoteadores les iban a hundir el concierto. El resto los miraba con total desdén. A la cuarta, la alborotadora mayor le espetó: “!Más caña joderrrrrrrr! !Qué parecéis Los Chunguitos!”. Entonces, Sergio Algora, el cantante del grupo agarró el micrófono y le soltó a la reventadora: “Pues venga niña, a ver si tienes huevos a irte ahora después de haber pagado un billete”. Acto seguido arremetieron con Creo que voy a dejarte (bueno no sé), la canción más agresiva y garagera El efecto lupa, el disco que presentaban y las aguas se calmaron relativamente. De cualquier modo, el concierto fue a trancas y barrancas, luchando el grupo con desdén y humor a una hostilidad que no llegó a decaer en ningún momento.
Teniendo en cuenta este precedente no deja de sorprender que, 11 años después, sea precisamente un local ourensano sea el encargado de organizar El Rey ha muerto: Viva el Rey. Curiosamente el promotor de la idea, David R. Pedrouzo, trabajaba entonces de camarero en la citada sala. «Buff, en los noventa en Ourense o hacías algo en plan Los Suaves o garage o sino te montaban el cristo. Yo recuerdo a Nosoträsh pasándolo fatal con la gente tirando cosas al escenario. Ahora todo es distintinto. Si a la gente le das un local donde se trata a la gente con respeto, no se porta así. Ahora parece que hayan estado escondidos porque, al final, resulta que todos escuchaban a los Surfin´Bichos de toda la vida».
Ahora David regenta ahora uno de esos locales, el Café Pop Torgal, centro neurálgico de la movida indie en Ourense. Explica el origen del acto: «Todo surgió por un encabronamiento mío con la revista Rockdelux. Me parece muy fuerte que cuando murió Sergio Algora no le dedicasen más que ocho líneas. Me resultó muy desalentador porque para mí es de los cinco grandes del pop en España y cosas como esta no hacen más que constatar que aquí todo va por modas. Como El Niño Gusano ya es música para quienes tienen hoy más de treinta, pues parece que ya no vale».
El homenajeado ya estuvo en el local de David. Fue hace tres años:«Vino para nuestro aniversario a tocar en directo con La Costa Brava. Era un tío que vivía en una fiesta constante, un hombre súper alegre. Ya entonces, se sabía que tenía problemas de corazón gordos, pero él vivía a tope. Dieron un concierto y luego pinchó toda la noche. Recuerdo que le gustaban Paul Anka y Burt Bacharach, es decir no pinchaba lo típico que le puede gustar a un indie».
En el concierto de esta noche, se tocarán muchas de sus canciones y también se leeará parte de su obra poética. Entre otros intervendrán Alvaro Lorenzo (Apeiron), Sumnormal (los antiguos Dado), Yo el Halcón (la nueva versión de Annie Hall, el grupo de la casa) u October Lee. David saca una lectura interesante de ello:«El primer grupo que toca, Los Impresionates, tienen sobre 18 años cada uno y Summormal tienen ya sobre 32. Es decir, que es un grupo que igual gusta a la gente de nuestra generación, como a los que vienen detrás, aunque luego en las revistas traten el tema como lo tratan». Pues eso. A disfrutarlo.
Por cierto, no es este el único homenaje que ha recibido desde Galicia este años. Miren aquí
Siempre he defendido el gusto de cada uno y he odiado la alienación rockdeluxiense donde el grupo que siempre me gustó pasa a ser regular y el que no me decía nada pasa a ser de lo mejor. Y me fastidia cuando a veces ciertas personas demuestran que van a un concierto a dejar la vida en vez de escuchar música. Muchos conciertos no son de estar botando de canción en canción y sin embargo te lo pasas en grande, no entiendo a la gente que sólo entiende un concierto como aquella sucesión de canciones conocidas que te hacen bailar, creo que hay mucho más. Disfruemos de la música y tengamos un poco de criterio propio que a muchos nos hace mucha falta.
Qué decir del Torgal, oasis de buena música en Ourense. Recomendable 100%, pena que no pueda ir hoy al homenaje. Por cierto que yo estuve en aquel concierto de La Costa Brava, estuvo bién, aunque me hubiera gustado más verlos en plan no acústico. Y me gusta más La Costa Brava que El Niño Gusano.
A morte deste cabaleiro foi a nova máis impactante do ano. Para min, un auténtico referente de post-adolescencia, aínda que non chegue aos 30. Os Planetas e Niño Gusano era do pouquiño decente que se facía entón en España, pasada a época de Penelope Trip, e xa extinguidos uns Surfin’ Bichos que non coñecín ata anos despois.
Hai mortes nas que non podes dicir xamáis «virá outro que será tan grande coma el». Como Algora non virá ninguén…
fantástico