La ministra Trinidad Jiménez considera que el constante incremento de las cifras de abortos en nuestro país es «un grave problema» que necesita «soluciones de urgencia». Estoy completamente de acuerdo. Eso sí, encuentro algo raras las «soluciones» que ha puesto en marcha esta misma semana con la liberalización del aborto y la libre distribución de la píldora del día después en las farmacias, sin receta médica e incluso a menores.
En el caso de la píldora, aduce la ministra que servirá para frenar la sangría de abortos, en contra de los datos fácilmente contrastables de nuestra propia experiencia (desde el 2001 hemos quintuplicado el consumo de píldoras del día después hasta las 540.000 y el aborto ha seguido creciendo, también entre las más jóvenes) y la de nuestros vecinos ingleses y franceses (En Francia se dispensa la píldora en las farmacias desde 1999) .
En el caso del aborto libre en las 14 primeras semanas, lógicamente, no argumenta Trinidad Jiménez que servirá para reducir el número de abortos —aunque con la lógica que se gasta, bien podría haberlo dicho—, sino que aduce en primer lugar que se trata de un derecho de la mujer. Dejémoslo estar. Debate inútil.
Si el aborto es un problema grave y parece obvio que ninguna de las dos medidas sirve para frenarlo, ¿quién se beneficia? Aparte del Gobierno, que ha utilizado ambos debates para disfrazar controversias más urgentes, dos industrias se frotan las manos: la abortista y la farmacéutica (siempre apoyada por la santa OMS, que ha incluido la píldora de marras en su lista de ¡medicamentos básicos!). Parece que el progresismo consiste en eso: en que ya no dicten la moral los grandes pensadores y humanistas, sino los departamentos de márketing de la industria del medicamento, secundados por el abrumador papanatismo científico que tanto conviene a sus cuentas de resultados.
Estoy hasta las narices de tus comentarios fachas en la última página de La Voz de los sábados, y en especial de tus moralinas en contra del aborto, que cada cual haga lo que le parezca, ¿o acaso crees que con la actual ley sólo se aborta en los supuestos legales? qué ingenuo… creo que es mejor que una madre no tenga a su hijo si éste no es deseado, luego la pagan los niños que están abandonados por sus padres y tienen que crecer en una institución…Estoy hasta las narices de la falsa moral de los peperos y de la iglesia, que manifiesta tanto «amor»(y a veces demasiado) a los niños, pero no los vi manifestarse en contra de la guerra de Iraq, donde han muerto y desgraciadamente mueren niños ya nacidos. Basta ya de tanta hipocresía!
Imaginemos que para disminuir las agresiones a mujeres a alguien se le ocurre despenalizarlas en determinados supuestos: lo lógico será que aumenten. Si las despenzalizas en todos los supuestos aumentarán más. Pues con el aborto igual.
Visto o visto, creo que as que van precisar receita médica son as túas columnas porque os efectos secundarios que provocan en algúns merecen unha análise psicolóxica profunda. Agora que a postcoital é máis inocua que unha aspirina, quédanos a droga dura de lerte e de seguir enganchados a esa costume túa, tan subversiva e perversa, de dicir o que pensas. Obrigada.
Un bico
No estoy, Don Paco, en su órbita ideológica, pero disfruto leyendo sus columnas, aunque discrepe de los contenidos.
Saludos de Luis.
¿Pero qué es lo que les ocurre a esta sociedad? He conocido a una mujer que abortó cuando era joven y su vida ha sido una amargura total -económicsmnente bien sitguada- así como una soledad grande. ¿A cuantas personas que abortaron han conocido los que hablan y escriben contra el columnista del sábado en La Voz de Galicia?. No es cosa de ideología la muerte de un ser que está en el seno materno. La Iglesai desde antes del nacimiento de una criatura lo cujida -nasciturus es palabra latina que algunos desconocen- y lo hace realmente. Datos: La Madre Teresa de Calcuta ha cuidado de los enfermos del SIDA -sus hijas lo siguen haciendo en Marruecos, según pude ver con mis ojos hace un año- y allí siguen viviendo de los donatiuvos de los no cristianos. ¿Quién dice lo contrario? Los misioneros de los diferentes países de África, no los abandonaron cuando los países europeos expoliaron las minas de fosfatos, de diamantes, hierro,etc., y tuvieron que darles la independencia, sin haberles preparados en universidades -Kenia, Congo, Mozambique…- y ahora les mandan preservativos.¡Vewnga ya, tíos!
Yo también disfruto con estas columnas, especialmente por el respeto con que cada semana tratas cualquier asunto. Admiro esa capacidad, incluso, en ocasiones, desde la discrepancia. Saludos.
ABORTO LIBRE A LAS 14 PRIMERAS SEMANAS
Como ser humano me invade una gran tristeza todo lo referente al aborto.
14 semanas son aproximadamente 3 meses y medio de embarazo.
Me pregunto qué sentiríamos si el acto consistiera en la extracción de la criatura del vientre materno, y su posterior entrega en brazos de la madre para que ella misma ejecutara el aborto…
Habida cuenta de lo anterior, me pregunto qué autoridad moral, también credibilidad, nos asiste al condenar cualquier sentencia que conlleve pena de muerte.
Me gustan los comentarios de Amalia porque, aunque muchas veces no coincido con ella, me quito el sombrero ante su clase.
En cuanto a ‘la Trini’ dice que el aborto es una tragedia y un derecho. Se me hace raro.
No comprendo que una persona se mosquee porque un articulista no opine lo que él. Eso significa que en el fondo lo tiene muy en cuenta. A mi me halagarían las palabras de Pesego si fuese Paco 😉
Pasando página. Voy a hacer dejar unas reflexiones a vuelapluma:
1)No comprendo que habiendo gran variedad de anticonceptivos hormonales y de barrera las ventas de la PDS sean tan altas.
2)No comprendo que para que me dispensen un antibiótico porque me duele una muela tenga que ir con receta médica y para provocar una tormenta hormonal pueda comprarla una menor sin ella.
3)Aunque a diferencia de Paco, justifique el aborto en contadísimos casos, estos no creo que supongan ni el 10% de los que se practican. Así pues, no creo que con esta ley vaya a aumentar el número de abortos. Simplemente evita el coladero del tercer supuesto.
4)El sistema en el que estamos es hipócrita. Muchas amigas mías me han comentado que en las entrevistas de trabajo ni se te ocurra decir que te vas a casar (aunque esto ya da igual) y menos que te encantan los niños. En un sistema en el cual el beneficio sólo se mide en términos económicos, no nos asombremos que muchas mujeres, aún deseando tener el hijo, aborten para no perder el trabajo. Seguramente en esto no ha reparado Dña. Bibiana Aído. Cuando ser mujer no sea un inconveniente, cuando haya guarderías en las empresas, cuando la maternidad sea vista como un estado de gracia y no como una carga…entonces estaremos en una sociedad más justa. Si el dinero del ‘Ministerio de la desigualdad’ fuese directamente a ayudas para los empresarios que tengan mujeres con hijos, para guarderías en las empresas…
5)¡¡Cuánto niño acaba en una trituradora y a cuánta gente le gustaría tener hijos y no pueden porque o bien no tienen pareja o bien simplemente no pueden!!
Un saludo
Yo estuve contra la guerra de Iraq. Si no recuerdo mal Juan Pablo II también.
Me alegra ver que estas opiniones contra el aborto todavía generan debate.
Tiemblo de miedo al pensar que en el futuro no habrá debate. Las madres ya no tendrán ningún remordimiento, porque los pensadores de ahora han anulado nuestras conciencias.
Raros tiempos éstos en los que hay que argumentar que está mal matar a un ser humano, indefenso.
…Tan raros como desde que el ser humano habita la Tierra. Y no creo que sea la peor de las épocas de la humanidad
El debate no es inútil, Don Francisco. Gracias a sus columnas Pasgo y otros se inquietan. Lo demuestran con exabruptos e insultos. Gracias a sus entradas Carlos y otros nos descubren nuevos puntos de vista: ¿qué pasaría si se extrajera el feto y se depositara en manos de sus padres para que consumaran el crimen? Gracias a que el debate está vivo personas como Amalia siguen diciendo cosas inteligentes y simpáticas. Yo entré en su blog hace poco y ya estoy enganchado y… obrigado.
Perdón. Se me olvidaba decir lo más importante. A mi tocayo: si se justifica un aborto, uno solo, se justifica la muerte de un inocente. Y el que lo justifica participa en el crimen.
Pues de ahí, saque su conclusión y condéme. ¿Porqué no me llama criminal directamente sin andarse sin rodeos? Juzgue y será juzgado, sobre todo sin conocerme.
Intentaré no llamarle muchas cosas que se me pueden pasar por la cabeza y tengamos un debate sosegado y cabal.
Hay una diferencia al menos de tipo legal: si se pudiese extraer al feto vivo, como Amalia y mi tocayo sugieren, ya fuese del tiempo que fuese, no se estaría matando a un ser humano, sino a una persona, es decir, un sujeto de derecho y eso está penado, al menos con homicidio. Y luego ponerse maximalista (esto no es un juicio, sino una conclusión de sus opinion sobre mí) diciendo que quien justifica a uno justifica a todos, es al menos llevarse por la pasión que se le denota en sus líneas. No es delito matar personas según que circunstancias (un cerco estrechísimo de ellas), pero en líneas generales, aunque no me alinee entre los ‘grupos provida’ soy una persona que ama profundamente la vida y a sus semejantes. Otra cosa son los axiomas políticos y religiosos de los cuales cada uno parte y a partir de él desarrola su credo e ideología. Eso posiblemente nos diferencie, pero normalmente somos más dados a ver la paja en ojo ajeno que viga en el propio. Un cordial saludo de su tocayo
El British Raj, causante de las devastadoras hambrunas de finales del siglo XIX, se amparó en el “evolucionismo social” para justificar el crimen que acabó con la vida de cuarenta millones de indios que por ser de naturaleza inferior o poco evolucionada- varaban como los restos de un vendaval, a las puertas de los palacios que acogían los festines mas fastuosos que conoció la historia. Pocas décadas después, otros decidieron ayudar a la “selección natural” a garantizar la pureza de la raza eliminando los impuros. Sorprende que los que defendían aquellas monstrousidades acusaban a sus detractores de retrogrados opuestos a la inexorable evolución de nuestra especie. Eso mismo me recuerdan los comentarios que hoy leemos justificando el aborto y me hacen pensar en la inhumana, insensible y despiadada actitud de los que se relamían ante las viandas abonadas con las cenizas de los crematorios.
Hola Prometeo, siempre es un placer leerte. Lo malo de los qe defendéis la vida “en cualquiera que sean las circunstancias” es que siempre os vais a los extremos más abyectos de la condición humana para poner el contraejemplo. Me gustaría conocerte y departir una tarde charlando contigo; para mí sería un honor medirme con alguien de tu talla. Para mí la vida comienza con la consciencia. La biológica comienza antes, lo sé. Y los casos en los que yo quizás (tendría que verme en el caso) abogaría por abortar serían malformaciones fetales graves, peligro de la vida física de la madre y quizás, este supuesto no lo tengo claro, el de violación. Con malformaciones graves del feto no estoy hablando de “síndrome de Down”, por si hay alguien mal pensado. Me refiero a aquellos fetos cuya vida va a ser difícilmente viable. Puede mi tocayo llamarme criminal; no me molesta porque no lo soy. Lo que JAMAS haría (y me han puesto a prueba una vez) es abortar porque es un hijo no deseado. La vida es muy aburrida si nos arrogamos el derecho de programar el número y la fecha de nacimiento de uestros hijos.
Podéis no compartir mis opiniones, y lo entiendo perfectamente, pero lo que no podéis hacer es insultar ni insinuar lo que no soy.
jbiurrun@coit.es
Estimado Javier: un placer leer tus opiniones. Comparto casi hasta el final tu punto de vista y tu criterio que defiende que la vida comienza con la consciencia. No me parece muy acertado ni el tono ni las descalificaciones del señor pasago hacia quien escribe este blog. Habla de peperos, fachas y esas cosas. No se debe generalizar, sobre todo sin conocer, mucha gente que conozco son seguidores del Partido Popular, entre ellas un servidor y aun así están a favor del aborto. Como digo, hay algo en lo que difiero. Los embarazos no deseados. Ahí tampoco se debe generalizar como el señor pasago hacía. Cuando juzgo algo me imagino que me pasa a mí. Tuve algún susto hace tiempo, de joven y te aseguro que hubiésemos abortado. Nuestras carreras (la de ella y la mía) se hubiesen ido al garete y no hubiésemos sido felices (de hecho, ya no estamos juntos). ¿Qué hubiese pasado con el niño?. Ni lo pienso ni lo pensaré, sólo lo pasaría mal. Mi expareja y yo vivíamos a unos 1000 kilómetros de distancia.
En muchos casos, respeto y comparto la opción de abortar en embarazos no deseados. Un placer, Javier y un placer, Francisco.