La Voz de Galicia
Seleccionar página

Guardias reconstruyen el choque de Ortega Cano

Alcoholemia positiva. Había bebido, y mucho. Ortega Cano dio un positivo muy alto de alcoholemia en el análisis de sangre que le hicieron en el hospital cuando ingresó tras invadir el carril contrario y estrellarse con su coche contra otro que circulaba correctamente y cuyo conductor murió en el acto. Según el informe hecho público por la familia del fallecido, el torero dio 1,26 gramos de alcohol por litro de sangre, que equivale a 0,63 miligramos por litro en la prueba de aire que habitualmente se realiza a los conductores que no tienen heridas que les impidan soplar en el etilómetro. Esa tasa supone un delito porque supera el límite fijado en el Código Penal (0,60 miligramos en aire y 1,20 gramos en sangre).
Si de algo ha servido la notoriedad de este caso es para demostrar una vez más que el alcohol es incompatible con la conducción. Son decenas los automovilistas que cada día salen a las carreteras con copas de más y ponen en riesgo su vida y la de otros. Lo sabemos bien en Galicia, una de las comunidades con más alcoholemias positivas y donde cada fin de semana cientos de conductores juegan a la ruleta rusa con el alcohol. Muchos pueden contar que una noche de borrachera los denunció la Guardia Civil de Tráfico. Otros no tuvieron tanta suerte y se quedaron en la carretera, ellos y los que venían de frente.