La Voz de Galicia

Lula y yo

Me apena la situación de Brasil, país para el que guardo un afecto especial desde hace casi treinta años. Estos días he recibido muchos mensajes de amigos de allí, antiguos alumnos la mayoría, periodistas casi todos. La percepción general puede resumirse en una palabra: impotencia. Uno de los mensajes resumía el panorama en una frase certera que me dio que pensar: no hablaba de Lula ni de Dilma ni de la conveniencia de que se retiraran o prosperara la moción para retirarlos. Se limitaba a decir que la gente es buena, que trabaja mucho, pero que, si se le presenta una ocasión favorable para atrapar algo más, no lo piensa dos veces. Y no se refería solo a los políticos.

Los brasileños son, en efecto, gente buenísima y muy trabajadora, pero lamentablemente, lo otro también es frecuente, como han podido comprobar quienes hayan intentado hacer negocios allí. No es … Seguir leyendo

Colau en tres refranes

Siempre pensé que Ada Colau tenía cara de buena persona y, por aquello de que «la cara es el espejo del alma», me caía bien. La juzgaba quizá osada, pero la osadía puede convertirse en una virtud política si se casa con la prudencia. Pronto percibí que su atrevimiento provenía más bien de ese otro dicho según el cual «la ignorancia es atrevida». La alcaldesa de Barcelona dio pronto señales de incompetencia que no me atrevía a juzgar como maldad. Solo incompetencia. La misma que le impidió pedir previamente al Ejército -por razones buenas o malas- que no acudieran a la feria educativa. La misma incompetencia que, quizá sin pretenderlo, la llevó a humillarlos.

Tal vez porque ignora que las Fuerzas Armadas proporcionan formación de mucha calidad y en todos los niveles: desde pilotos de aviación e ingenieros hasta mecánicos o conductores de vehículos especiales. Tal vez porque ignora la … Seguir leyendo

Contra Trump

Hace unos años fui arrastrado por el afecto a una reunión de la que nada sabía, salvo que se trataba de negocios. Se desarrolló en la sala de un hotel y, pasados pocos minutos, comprendí que aquello tenía pinta de estafa piramidal. Había una docena de incautos, todos en el paro o en sus aledaños, todos con problemas que iban contando en voz alta. Algo sencillamente sórdido que aguanté, insisto, por mero afecto hasta que no pude más y aduje una excusa para escaparme sin ofender. No sabía si aquello debería ser investigado o denunciado, y lo dejé estar por miedo a herir sin necesidad. La sorpresa mayor de aquella puesta en escena había consistido en un vídeo en el que salía Donald Trump recomendando el sospechoso negocio.

No tenía por entonces buena opinión de Trump, cuyo apellido se puede traducir como naipe de triunfo en los juegos de cartas, … Seguir leyendo

Una homilía

Me llegó el vídeo de la homilía en el funeral por Antonin Scalia, el polémico juez del Supremo estadounidense recientemente fallecido. Empecé a verla por cortesía, por poder decir algo a quien me la envió, pero muy pronto me di cuenta de que me encontraba ante algo excepcional, ante una pieza ejemplar de oratoria fúnebre católica pronunciada con indecible aplomo por el propio hijo del juez, Paul Scalia. El arranque algo efectista, después de los saludos y agradecimientos obligatorios, captó por completo mi atención y ya no pude dejar de escucharle hasta el final.

Paul Scalia habló poco de su padre: no glosó su gigantesca figura profesional o humana, huyó de la hagiografía. Se limitó al agradecimiento filial. Y al hacerlo, dijo algo que me conmovió: «Nos quería [a sus nueve hijos], y procuraba mostrar ese amor y compartir la bendición de la fe que veía como un tesoro. Nos … Seguir leyendo

Tolerancia cero

Hace ya muchos años, siendo aún presidente, Felipe González se quejaba de la crispación. Sobre todo, de la crispación de la vida política y, particularmente, de la parlamentaria. Hoy se habla ya de intolerancia y se vuelve más que nunca a la maldita referencia a las dos Españas. El tono del debate público -si es que podemos llamarlo así- se ha elevado y envilecido. Debemos reconocerlo para arreglarlo -o terminaremos a guantazos- en vez de jalearlo desde posturas políticas cerradas o desde medios acostumbrados a la comodidad de defender lo que nadie ataca o de atacar lo que nadie defiende.

Recordaba estos días, a propósito de otro incidente, la definición de caballero que ofrecía John Henry Newman en su Idea de una Universidad. Viene muy a cuento en días como este. Según él, «decir que el caballero es una persona que nunca hace daño equivale casi a definirlo». Excelente punto … Seguir leyendo

Siéntense

Casi todos los días alguien interpreta qué mensaje quisieron mandar los españoles en las últimas elecciones generales y, a menudo, se insiste en que se trata de un mensaje de cambio. Bueno, de acuerdo. Los españoles con nuestro voto hemos mandado cambiar. Se puede discutir en qué consiste exactamente el cambio que queremos, pero hay algo que no se puede discutir por obvio: los españoles no deseamos una mayoría absoluta de nadie y sí pretendemos que se forme un Gobierno mediante el diálogo entre los diversos partidos. Y eso, justamente, es lo que no se está haciendo. Nadie está hablando en serio con nadie. Ni siquiera se atisban verdaderos esfuerzos de aproximación real de posiciones, sino juegos casi macarras por ocupar espacios desde los que negociar más cómodamente o desde los que convertir en poco menos que imposible cualquier negociación.

Es hora de que se negocie de verdad y con … Seguir leyendo