Una vez le preguntaron a Gandhi qué pensaba de la civilización occidental. Respondió: «¿Civilización occidental? Sería una buena idea». Hoy no resulta tan gracioso. Hemos pasado de un tiempo en el que Estados Unidos parecía poder arreglarlo todo a otro en que nadie quiere arreglar nada. Un tiempo sin coraje. Da igual que Putin se coma a bocados Ucrania saltándose a la torera todas las leyes internacionales o que Boko Haram y el Estado Islámico degüellen de uno en uno, de quince en quince o que martiricen a miles de cristianos en Nigeria o en Irak; da igual que Turquía vuelva a la condición de régimen autoritario, que el Egipto actual sea peor que el de Mubarak o que Maduro detenga porque le da la gana a sus opositores políticos. Sin contar, por supuesto, las barbaridades del régimen chino. ¿Cómo responden Estados Unidos y Europa? Con enérgicas protestitas perfectamente medidas y alguna sanción económica tibia.
Esto explica el resurgir del autoritarismo en el mundo. Después de 30 años de expansión, la democracia pierde presencia en el mapa, según un estudio recién publicado por el profesor Larry Diamond, experto en la materia de la Universidad de Standford. Otro tanto ocurre con los indicadores de libertad, menos en los países occidentales. Los dictadores viven más sueltos.
Diamond lo atribuye a los malos índices de buen gobierno, transparencia y corrupción -peores en todas las áreas del mundo- y a la falta de energía de las democracias occidentales, polarizadas y políticamente bloqueadas. Como si desde el fin de la guerra fría nos hubiéramos quedado sin política y sin políticos, sin más ideales que el consumo, sin energía más que para protestar por lo nuestro.
É certo que o que chamamos democracia occidental está enferma, a min paréceme que é por non temos gobernos políticos senón delegacións de multinacionais, bancos e grandes fortunas. Non importa quen sexa o gobernante de un país si é un ditador golpista ou unha persoa honesta elixida só se atende ao negocio que poda dar casos temos: Arabia, Venezuela, Cuba, China, Congo e así unha chea deles. Por un lado din que son o demo e por outro sempre se fan relacións mercantís.
Non funciona o mundo non hai políticas so existe o mercado, non temos organizacións supranacionais efectivas e eficientes, están corrompidas. Os gobernos nacionais están cheos de corruptos.
Así que a maioría da xente non espera nada da política e so intenta vivir o dia e buscar acomodo para os seus fillos.