La columna de noviembre-diciembre en Nuestro Tiempo:
La palabra ‘indignación’ y sus amigas culebrean por el diccionario hasta desembocar en la voz ‘indignidad’ y todo su parentesco. Parece que nada tienen que ver, salvo esa promiscuidad ortográfica, si bien al fondo de la ‘indignidad’ surge una última acepción que apunta al mismo significado que ‘indignación’: “Enojo, ira”. Quizá conecte con que la indignación, aunque el diccionario lo calle, funciona como una especie de respuesta a la indignidad o a los crímenes contra la dignidad.
100% de acuerdo.
Magnífico artículo.
Perdonad, no he visto los comentarios hasta ahora, porque la herramienta los ha enviado directamente a “spam”.