Entrevista de Leandro Pérez Miguel a Ander Izagirre en Gente de Internet.
3 Comentarios
Maikel
el 11 febrero 2010 a las 11:18 pm
Es todo un Michener, ¿no?
De todos modos se habla siempre mucho del reporterismo y, la verdad, lo que echo mucho en falta en el periodismo actual más que los reportajes es el rigor informativo y el afán por buscar, por desentrañar y por transmitir la verdad de las cosas.
Quizás en el periodismo actual también falten reportajes, pero añadiría que deberían ser reportajes interesantes, que sean interesantes para los lectores, no para el periodista.
Ahora mismo me vienen a la cabeza dos trabajos periodísticos que me llamaron la atención. Uno era un reportaje en El País, un reportaje breve y sencillo, sobre personas a las que le había tocado la lotería. Me encantó por lo que contaban. El otro trabajo fue una entrevista al rector -no sé si se llama así- de la Universidad de Oxford, un tipo que sonó para la presidencia de la UE y cuyo nombre no recuerdo. Me gustó el personaje.
Quizás sean tonterías pero gracias a esos dos trabajos, como consumidor de medios, me re-enganché a ambos diarios y si en un periódico hubiese un solo artículo como aquellos que me gustaron, estaría dispuesto a comprarlo.
Y me pregunto: En nuestro país, ¿qué trabajos periodísticos han tenido verdadero impacto en la sociedad?. Me vienen dos a la cabeza: las investigaciones sobre el GAL y sobre la corrupción de los 90 y el documental sobre los niños huérfanos de China. Supongo que habrá más. ¿Cuáles os parecieron a vosotros?
Pigafetta, el cronista del gran viaje, cuenta el abandono de Juan de Cartagena y Pedro Sanchez de la Reina mientras miran alejarse las naves, huérfanos de jefe y destino, apartados de la historia en que se veían inscriptos. En sus ojos se distingue el relato de la muerte, una danza lenta que irá desencadenándose por etapas. (Por cierto a punto estuvo de compartir destino con ellos, uno del que ya le hablé un día a Ander. Aquel que por culpa de una moneda al aire, acabó robando la gloria a Gonzalo de Vigo. El leal capitán que murió intentando abrir la ruta más valiosa, la misma que habría de tardar casi medio siglo en lograr el gran Urdaneta. Pero a estas alturas todos sabemos del gran complot que es la historiografía oficial)
Los cronistas de viajes como Ander y Pigafetta, provocan en los que nos quedamos, una sensación parecida a la que este último describía aquel día.
“Dos marinos españoles han quedado en la playa, condenados al abandono. Ellos y los barcos componen una alegoría: “lo afortunado de partir”; “la desgracia de quedar”. Clavados en la arena, como dos picotas que se estuviesen castigando a sí mismas.”
Es todo un Michener, ¿no?
De todos modos se habla siempre mucho del reporterismo y, la verdad, lo que echo mucho en falta en el periodismo actual más que los reportajes es el rigor informativo y el afán por buscar, por desentrañar y por transmitir la verdad de las cosas.
Quizás en el periodismo actual también falten reportajes, pero añadiría que deberían ser reportajes interesantes, que sean interesantes para los lectores, no para el periodista.
Ahora mismo me vienen a la cabeza dos trabajos periodísticos que me llamaron la atención. Uno era un reportaje en El País, un reportaje breve y sencillo, sobre personas a las que le había tocado la lotería. Me encantó por lo que contaban. El otro trabajo fue una entrevista al rector -no sé si se llama así- de la Universidad de Oxford, un tipo que sonó para la presidencia de la UE y cuyo nombre no recuerdo. Me gustó el personaje.
Quizás sean tonterías pero gracias a esos dos trabajos, como consumidor de medios, me re-enganché a ambos diarios y si en un periódico hubiese un solo artículo como aquellos que me gustaron, estaría dispuesto a comprarlo.
Y me pregunto: En nuestro país, ¿qué trabajos periodísticos han tenido verdadero impacto en la sociedad?. Me vienen dos a la cabeza: las investigaciones sobre el GAL y sobre la corrupción de los 90 y el documental sobre los niños huérfanos de China. Supongo que habrá más. ¿Cuáles os parecieron a vosotros?
Gracias, Paco.
Pigafetta, el cronista del gran viaje, cuenta el abandono de Juan de Cartagena y Pedro Sanchez de la Reina mientras miran alejarse las naves, huérfanos de jefe y destino, apartados de la historia en que se veían inscriptos. En sus ojos se distingue el relato de la muerte, una danza lenta que irá desencadenándose por etapas. (Por cierto a punto estuvo de compartir destino con ellos, uno del que ya le hablé un día a Ander. Aquel que por culpa de una moneda al aire, acabó robando la gloria a Gonzalo de Vigo. El leal capitán que murió intentando abrir la ruta más valiosa, la misma que habría de tardar casi medio siglo en lograr el gran Urdaneta. Pero a estas alturas todos sabemos del gran complot que es la historiografía oficial)
Los cronistas de viajes como Ander y Pigafetta, provocan en los que nos quedamos, una sensación parecida a la que este último describía aquel día.
“Dos marinos españoles han quedado en la playa, condenados al abandono. Ellos y los barcos componen una alegoría: “lo afortunado de partir”; “la desgracia de quedar”. Clavados en la arena, como dos picotas que se estuviesen castigando a sí mismas.”
Felicidades y un gran abrazo.