Copio de Toni Piqué:
El País y el periodismo de sospecha
Es una de las grandes especialidades de ese diario: periodismo que apenas prueba o informa de nada pero que hace pensar de todo. Cocina delicada: exige componer certeramente insinuaciones, dobles sentidos, medias verdades, calificativos y, por supuesto, fuentes anónimas A-Las-Que-Es-Imposible-Identificar-Por-Temor-A-Represalias, etc.
Las víctimas suelen ser personas o instituciones que contrarían, molestan o desafían sus expectativas y prejuicios ideológicos y, sin embargo, son eficientes o llevan buena vida o son socialmente apreciadas.
Es decir, deberían ser malas, pues no encajan en la línea del diario y/o el prejuicio del periodista… pero resulta difícil o imposible demostrarlo. Empieza entonces la siembra de suspicacias sin pruebas, sin fuentes y sin datos. El prejuicio se erige en norma de juicio. (click en el título para ver el artículo completo en el que disecciona el reportaje)
La verdad es que esperaba que fuese el propio Paco el que expresase su opinión sobre el reportaje. Supongo que lo hará en breve.
Ayer le eche un vistazo en diagonal y, bueno, me pareció gracioso. Me alegró tanta publicidad para ese convento y como no sabía de su existencia me interesó.
En verdade se está a facer un gran labor, alí, da man da irmá de Raúl…
«Empieza entonces la siembra de suspicacias sin pruebas, sin fuentes y sin datos».
El País, El Mundo, La Razón… ningún rotativo se salva de la criba, si nos ponemos sólo un poquito- sólo un poco, eh, no demasiado- estrictos.
Todavía recuerdo con intenso arrobo la crónica rosa de la supuesta mochila bomba y la cinta de la orquesta Mondragón y el hollywoodiense complot policial… o la detallada noticia de la pertenencia de ZP a una orden masónica, que se vendía como hecho irrefutable y «contrastadísimo».
Habla Chomsky sobre los medios impresos: » Ellos tienen algo llamado los huecos de noticias. Cuando los editores diseñan el periódico que aparecerá al siguiente día, primero hacen las cosas importantes: ponen los anuncios alrededor. Entonces tienen una pequeña parte que dejan, que se llama el hueco de noticias y ponen pequeñas cosas ahí. Los medios son sólo grandes corporaciones y, por supuesto, representan los intereses de sus propietarios, sus mercados, que son los anunciantes y, para los periódicos de élite, más o menos la clase dirigente y la población educada con la que tratan. El resultado final es que tienes una perspectiva muy estrecha de cómo es el mundo».
O las pinzas medio impreso-poder político tipo: yo, que soy alcalde casado con familia de constructores, te subo de cuando en vez caros publirreportajes y tú te guardas las «cositas» que vayan surgiendo en un cajón y así tiramos veinte o más, hasta que llegue otro rotativo y comience a tirar de la manta y a mí me manden de embajador a… un lugar donde se coma bien y los hombres se vistan por la cabeza.
Estos medios impresos subvencionados y sin grapa se la han estado buscando desde hace mucho, con una falta de ética manifiesta.
A buenas horas se quejan.
Saludos de Jim, Paco y demás. Uno siempre, tarde o temprano, vuelve a los lugares en que fue un poco feliz y se siente cómodo.
Si, pero por lo menos que los huecos de noticias los rellenen con verdades, je,je.