Alguno habrá imaginado que el tema de esta columna de hoy sería el proyecto de ley abortista. Pero no. Tampoco hablaré de los extrañísimos movimientos de togas antes y después de la campaña, perfectamente combinados con algunos medios. Sería tanto como hacer el juego a una estrategia de comunicación que, cada día más, se dedica a velar la ausencia de política real. Un poco de carnaza abortista entregada justo a tiempo sirve para contraprogramar un dato de paro tristísimo y unos resultados electorales malos. Como antes le sirvieron los espías de Madrid y la investigación rarita de Garzón para evitar que se hablase de otras cosas en las campañas gallega y vasca.
Un profesor de Harvard, Joseph S. Nye, decía hace poco en un artículo a propósito de Obama: «El poder blando es la capacidad de atraer a los demás, y sus cualidades esenciales son la visión, la inteligencia emocional y la capacidad de comunicar. Pero un líder necesita también cualidades del poder duro, como una capacidad organizativa y hasta maquiavélica. Igualmente importante es la inteligencia contextual que le permite variar la mezcla de estas habilidades en diferentes situaciones para producir las combinaciones exitosas que yo llamo ‘poder inteligente’”.
Zapatero andaba bien de «poder blando», pero ha abusado de él en estos años, que se han caracterizado, además, por la falta de visión. De «poder duro» también hizo algunas exhibiciones, pero sobre todo dentro de su propio partido y a la hora de enredar hasta lo indecible las relaciones con las autonomías. En los asuntos que ahora nos agobian, sin embargo, apenas ha demostrado eficacia alguna. De ahí que su poder, según la terminología de Nye, no pueda calificarse de ‘inteligente’. Del ‘blando’ solo tiene la apariencia y del ‘duro’, el maquiavelismo. Falta la visión y, por tanto, la eficacia.
Hola, Paco, acabas de darme una razón más para seguir manteniendo el mantenido.
«En los asuntos que ahora nos agobian», dices. Me gusta ese agobian, un político jamás recurriría a ese verbo.
Tampoco conjugan porfiar, otro verbo con miga.
Y le falta liderazgo y fiablidad (como a los coches). ¿Le dejarías a Zapatero que gestionara tus ahorros? ¿Te tirarías por un barranco si te lo pidiera? Obviamente no creo que haya ningún político por el que hicieras estas cosas. Pero el caso es que Zapatero es nuestro presidente. Y esa es su responsabilidad: convencernos de que podemos responder que sí. Si no es capaz de asumirla y de liderar, lo mejor es que lo deje. Por el bien de todos. (Pero él y cualquier otro).
Eso del poder blando y del poder duro…no sé…suena a explicación rebuscada.
Y en cuanto a lo del aborto, a mi si me gustaría decir algo. Después de analizada la propuesta de la comisión de igualdad y la propuesta del Gobierno me parece que ha quedado meridianamente claro que el PSOE promueve el aborto y no le importa lo más mínimo que las mujeres abortn, y si abortan mucho, pues mejor. Y no es una opinión, son los hechos (me remito a las declaraciones de esa lumbrera llamada Aído y a las propuestas que han presentado tanto el partido como el Gobierno). Creo que el último año hubo 100.000 abortos. Pues bien, el año que viene habrá 200.000.
É un xeito de velo. Para min ZP é un «vendepatrias» por catro duros. E máis, ainda non sexa un letrado, penso que se podería acusar a ZP de alta traición a España. O peor desto é ver que o PP pasouse catro anos sin facer oposición de verdade. A min, a «intelixencia emocional» do «señor ZP» paréceme as dos charlatans, esa profesión xa perdida que tanto animaban as rúas de antaño
Efectivamente…!
El poder inteligente de ZP puede que se le termine cuando los españoles de a pie queramos darnos cuenta cómo se juega con nuestros sentimientos y se nos quiera manipular. Como bien se dice el tema del aborto -que si una chica de 16 años es capaz de abrotar sin permiso paterno o materno- es una muralla de humo para que no veamos lo que hay más allá. ¿Dónde estuvo ZP la noche -«noche triste»- de Touriño del domingo uno de marzo? ¿Por qué se nos escapa y esconde cuando las cosas no les van bien? ¿Qué hará el día o la noche -todo le llegará a ZP- que pierda lo que tiene ahora?¿Quién le consolará?
El tema del aborto me pone del hígado. Es que va, aparte de contra el sentido común contra el Código Civil. Si a una menor el colegio le hace una foto de catalogo sin permiso paterno, ¡se monta el pollo! Pero puede abortar (es decir, someterse a una operación quirúrjica) sin permiso paterno. ¿Dónde está el sentido común? Y las declaraciones de la «señora» Aído son de razonamiento de niño de tres años. Y lo que me sorprende más, es que gente que tengo por culta, se las traga. En fin, tenemos lo que nos merecemos!
Han desaparecido un par de comentarios. Lo siento. No recuerdo de quién eran, pero agradecería que los vuelvan a enviar. Si no, que sepan al menos que no los he borrado yo.
Que la señora Aído sea ministra es un insulto a toda la sociedad. Parece mentira que alguien que no tiene ninguna experiencia sobre nada, cuyo curriculum se reduce a medio folio -contando los datos personales- pueda ocupar un cargo de tan alta relevancia. Es de risa. Y, como dice Javier, no hay más que oirla hablar. Y encima, que se ocupe de legislar algo tan grave como el aborto. Vamos…por favor…es que es alucinante.