Me han disgustado algunas de las fotos de la niña iraquí que decidió entregarse a la policía en lugar de inmolarse.
No estoy seguro de que suponga una ayuda para ella el que todo el mundo conozca su cara.
Pero, sobre todo, estoy convencido de que los fanáticos que le ataron los explosivos al cuerpo utilizarán esas fotos en que se la muestra esposada a una reja, medio desnuda -al menos para los estándares musulmanes- y con un policía varón trabajando sobre su chaleco.
Entiendo que las cosas se hayan hecho así, pero no entiendo que nadie haya caído en la cuenta de que no podían tomarse esas fotografías o, ya tomadas, difundirlas.
Éstas faltas de comprensión y de respeto por su mentalidad, que entienden como afrentas, sólo sirven para afinar el odio.
Paco Sánchez: escritura en la cuerda floja
Pois tes razón, verdadeiramente tes razón…
Non reparara niso.
En este caso se dan dos circunstancias para no difunduir la foto, Primero, e una niña inocente ella del todo. Segundo, el ser iraquí. Esto le llevará más tarde o temprano a ser inmolada de alguna forma. Es otra cultura diferente a la nuestra. Y esto no se perdona (el hecho de que no haya explosionada la carga)
Coincido contigo en la inconveniencia de la publicación pero la foto me ha precido indecorosa incluso para los estándares europeos.
Precisamente esta falta sistemática de respeto por los otros es lo que va llevando las cosas a los extremos en que nos encontramos. Gracias a Dios que todavía hay quien repara en esta falta de sensibilidad. El periodismo está cada vez más falto de respeto, sensibilidad e incluso, si se me permite, de moral… eso sí, mucha sensiblería y sensibilitud…claro.
A mil por hora (esta é unha hora moitísimo axetreo para min…)querería discrepar, cordialisimamente, de Pau.
Non creo que o xornalismo estea cada vez máis falto de respecto polos demais.
O xornalismo segue sendo o que sempre foi: o oficio de defender a verdade.
Despois hai outra triste cousa moi distinta, e que a min tamén me preocupa, pero que non ten nada que ver co xornalismo: converter en espectáculo a dor allea.
Creo que diferencialas é importante.
Boas tardes a todos.
Volverei con máis tempo.
Vale, puede que no sea periodismo lo que tanto abunda… entonces escasea mucho el periodismo. Escasean los periodistas y abundan estos otros profesionales que convierten en espectáculo todo fenómeno manipulable, no solo el dolor. Que emiten noticias con fecha de caducidad y sin la suficiente «seriedad». No le llamemos periodismo, vale… pero existe y abunda.
Hay que mirar también las razones de los agregidos, de los potencialmente asesinado por esta niña subjetivamente inocente y manipulada, pero objetivamente encarnación del terror más inhumano, falso y gélido.
Desvestir las ropas habituales de la convivencia ritual para mostrar las armas del crimen es una obligación imprescindible para desnudar la maldad de los cerebros del terror. Considero imprescindible la noticia en todos sus matices; hubo valor en los dos policías irakíes que se arriesgaron a llegar a ella; sus gestos fueron meramente pragmáticos, para desactivar el explosivo. Impidieron que otros compañeros se acercaran para evitar riesgos.
Los violadores de la intimidad y de la mente de la infancia inocente son los señores del terror, siempre enfocados en un segundo nivel para la información occidental.
Pero sin ellos no continuaría la guerra ni el terror. Irak tiene constitución y ha ido a varias elecciones. Pero existen poderes ocultos para las cadenas de información occidentales, casi vetos a la explicación causal de los hechos de los que se informa.
Pero casos como el de la niña irakí desnudan la brutalidad nihilista del verdadero mal.
Milton, no sé si entiendo. Por supuesto que estoy de acuerdo en cómo se actuó, y lo digo en el texto. Pero no en algunas de las fotografías concretas que se difundieron y que solo favorecen la causa de los terroristas. Es fácil imaginar cómo las utilizarán para desanimar comportamientos parecidos a los de la niña: «Si os entregáis, pasará esto». Había otras fotos y bastaban para ilustrar lo que dices.