La Voz de Galicia
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Protagonista viene del griego «protos-agón»  que significa «el que lucha primero, el que primero sufre». Prólogo, también viene del griego y quiere decir  «el que habla antes de la obra».

Entre los varios nemes que uno recibe a diario de diferentes tribus y amigos , recibí uno que venía a decir algo así como: ¿Se imaginan si hace menos de un año nos dicen que íbamos a ir todos con mascarilla, a dos metros de distancia y embadurnados de desinfectante  -la obligación de su uso está desarrollando en muchos neandertales el saludable hábito de lavarse las manos-porque hay ochenta mil muertos provocados por un virus que nos acosa? ¿Se imaginaban ver a un chamán animista y vegano vestido de castor  con cuernos tomar el Capitolio? ¿O podían imaginar una nevada de tal coraje que cubriera el país con un manto de hielo como el Cristo Velato de Nápoles?. Frente al Cristo de la Capilla de Sansevero uno siente el vértigo de la realidad de lo imposible.

¿Se lo imagina?¿se lo hubieran creído? Pues en esas estamos, como un inquilino que no se lava las manos y sabe que le van a aplicar el derecho de admisión. Perplejos.

La figura del «Prologus» apareció en la bárbara Roma que, cuando acudía a presenciar una obra de teatro clásico griego, se comportaba como los quintos del tendido de sol en Peñaranda de Bracamonte. No atendían a nada que no fuera burlarse de los actores y beber ambrosía. El prologus explicaba a la multitud antes de la representación lo que iban a ver,  la historia que iban a escuchar y pedía respeto por la escena. Así comenzaron los romanos a comportarse civilizadamente y aprender de los clásicos.

En la realidad que se está construyendo se necesitan buenos y atrevidos prologus capaces de llamar la atención sobre lo que vamos a presenciar. Se necesita más periodismo de opinión que ponga el foco sobre lo que se nos viene encima y que argumente desde fuera de cualquier burbuja política.

Estamos viviendo un tiempo histórico y conviene recordarlo para no perdernos en el relato de una estupidez, por no mirar, no escuchar, no decir y convertirnos en monos.

Hoy más que nunca estamos obligados a pensar y estar atentos a la realidad porque  nos va el futuro en ello.

Puede ocurrir -como decía otro neme- que si siguen pasando tantas cosas gordas seguidas se nos hagan bola y nos asfixiemos.

Por eso hay que estar muy atentos al prologo de esta nueva historia  porque no podemos olvidar que para bien o para mal, en esta historia que se está empezando a escribir nosotros somos los que primero tendremos que luchar con ella.

Protagonistas especiales sin guión.