La Voz de Galicia

Muxía

Volví a Muxía, un nombre que, por alguna razón que no acierto a concretar, evoca en mí sensaciones recias. Se lo decía ayer al Director de este periódico, que es muxián, mientras acompáñabamos al Editor en la visita a la Biblioteca que allí le han dedicado. El Director, con ese talento sereno y desmitificador que se gasta, contestó riendo: «Es el granito, hombre, es el granito». Porque yo le decía que en ningún lugar como en aquel notaba semejante sensación telúrica. En ese sentido, lo del granito era un argumento sólido. Ya me asaltó esa percepción la primera vez que vi, lo recuerdo bien, el Santuario de Nosa Señora da Barca desde Camariñas, como una catedral fantasma que emergía del mar con sus dos torres. Pensé entonces que sería cosa de la distancia, de la niebla, de mi estado de ánimo acaso. Pero siempre que regreso, se repite.
La evocación … Seguir leyendo