La Voz de Galicia
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La Dirección General de Tráfico activará este jueves, 17 de marzo, cinco nuevos radares en las carreteras gallegas. Lo hace un día antes de que se ponga en marcha el dispositivo especial de vigilancia para la Semana Santa. Dos de los nuevos radares son de tramo, es decir que controlan la velocidad en un espacio entre dos puntos kilométricos, y estarán situados en la carretera N-550, en A Sionlla (Santiago), y en la N-525, a su paso por Ourense. Dentro de cada uno de esos dos tramos, pero en el sentido contrario será activado otro radar, en este caso fijo. Además, la DGT activará, también el jueves, otro radar fijo en la AC-12 (N-VI) a la altura de las curvas de Biona, en San Pedro de Nós (Oleiros). En todos los casos, los radares cuentan con una señal de aviso situada aproximadamente un kilómetro antes.