Si no hubiese radares

¡Me han cazado. Esto es para recaudar! Este es uno de los comentarios más escuchados a conductores sorprendidos por un radar de Tráfico. La excusa está asegurada aunque el radar se encuentre señalizado por una señal vertical o por una advertencia luminosa en un pórtico sobre la calzada. Estos días se supo que Galicia es una de las comunidades españolas que más recauda en denuncias por excesos de velocidad. ¿Y eso a qué se debe? Pues si las denuncias están bien tramitadas (es decir que no han sido anuladas por errores en la medición de la velocidad) solo hay una explicación posible: un exceso de velocidad. Ese dato también indica que en Galicia se corre demasiado, como ya recordaba hace unos días, en una entrevista en La Voz, la coordinadora de la DGT en Galicia. «Se corre mucho», advertía. Si hay más recaudación por los radares es que hay más excesos de velocidad. Los radares siempre han sido objeto de controversia. Pero lo cierto es que su implantación masiva en las carreteras españolas ha coincidido con el gran descenso en el número de muertos: solo en Galicia, de 300 a 100 fallecidos al año. ¿Qué pasaría si no hubiese radares? Yo lo tengo claro.