Del fútbol a la carretera. Os imagináis a Mourinho y a Guardiola al volante. ¿Cómo se comportan en la carretera? ¿Son agresivos o calmados en el coche? ¿Cuál es más prudente? A la vista de sus actitudes más recientes, Mou tiene pinta de ser un mal conductor. Lo imagino nervioso y protestón. Quejándose por los atascos, por el coche de delante, por el de detrás, por los peatones, por el reglamento, por las señales, por la lluvia, por el sol… El portugués puede ser el conductor al que denuncian siempre en el mismo radar (podríamos pensar en el de Fene) y que cuando el guardia civil lo para y le dice que lo han pillado, él pregunta: ¿Por qué? ¿Por qué siempre a mí y nunca a Guardiola? La DGT, el Gobierno, las grúas y los radares están contra mí ¿Por qué?, clama el portugués.
A Guardiola, sin embargo, lo imagino educado, respetuoso con las normas, solidario, prudente. A Pep, por tanto, lo llamarán de los colegios para que hable a los niños de seguridad vial, de comportamientos éticos al volante, de cómo evitar accidentes, de su experiencia en la conducción de un grupo como el Barça, de educación y de respeto.
Mou y Pep, dos formas distintas de ver el fútbol, ¿y también la carretera?
Circulo por el puente de As Pias varias veces por semana y, a pesar de ello, a veces es imposible no despistarse y pasar a más de 50 Km/h en esa zona. Además, circulando por el carril de la izquierda -sólo hay una señal indicadora de limitación a 50 Km/h en el lado derecho- un camión o un simple furgón que circule por el carril derecho puede taparla. Yo creo que la cuestión no es de quien es competencia el radar, sino de que se señalice adecuadamente la entrada en zona urbana (por ejemplo bandas sonoras en el pavimento, unos metros antes del radar, claro).
Está claro que, si lo que pretende la DGT es reducir la velocidad no lo está consiguiendo, ya que muchísimos conductores continuan siendo multados; imagino que una gran mayoría son incautos que no conocen la zona. Insisto, si realmente sólo se busca la seguridad en la zona, que se señalice adecuadamente y no sólo con aparatos electrónicos sancionadores que no advierten de nada.
Alberto Fernández
A Coruña