Doce y media de la noche en Alfonso Molina, la avenida de salida de A Coruña. Límite 80 km/h. Bastante tráfico, es noche de sábado. Acabo de incorporarme a la vía procedente de Arteixo y un 206 blanco va pegado a mi matrícula trasera. Le sigue otro coche del mismo modelo. De repente, uno me adelanta por la derecha y otro por la izquierda. Pisan a fondo. El ruido es atronador. Huele como en las carreras. Los dos coches avanzan entre el tráfico, zigzagueando entre los tres carriles. No les importa el resto del tráfico, solo quien llega antes. Es un pique. Se conocen. Los veo charlando en la meta. Era la gasolinera. Apenas 700 metros de adrenalina. Unos segundos de disfrute poniendo en riesgo varias vidas. ¿Habrá merecido la pena? ¿Será esta una pista de carreras de madrugada?
Piques de madrugada en A Coruña
por José Manuel Pan | Mar 18, 2012 | Locuras, Responsabilidad, Seguridad vial, Velocidad | 3 Comentarios
Y otro tractor agrícola, y otra persona mayor….. esto no tiene fin. Supongo que me adelanto a tú próximo tema, pero es que no aprendemos. Y ya no voy a repetir los argumentos que en este mismo blog ya expuse sobre el particular, pero me da la impresión que «alguien» está mirando para otro lado. Y no te lo pierdas, con nuestro nivelazo de educación vial, va el ministro de turno y nos anuncia que aumentará los límites de velocidad en nuestras super-modernas infraestructuras viales….. es como tener ganas de me… y no echar gota. Amigo Pan, creo que en el desierto son más eficaces estas tribulaciones que en el mundo civilizado.
Un saludo
Seguro que te falta en la descripción que eran jóvenes, que iban ocupados por 3-4 individuos, etc. etc. , pues sí, es lo que toca. Triste pero real. Que quieres que te diga, pues quizá el avance tecnológico influye en estos temas (como en tantos otros. Me refiero a las «quedadas», a los «wasup» (me temo que no lo escribo correctamente, bueno vete tú a saber), a los «perfiles», a los «muros»…… Habría que profundizar en esta cuestión por profesionales y a lo peor, nos llevaríamos una gran sorpresa. Ahora bien, el fondo es el que es: delincuencia vial en toda regla, y no debemos sonrojarnos cuando se les aplica de lleno el Código Penal; incluso me parece poco.
Un saludo
Tienes toda la razón. Claro que falta decir que iban cuatro jóvenes en cada coche. Pero lo peor es que eso se repite con demasiada frecuencia en carreteras y rotondas de nuestros pueblos y ciudades. Hasta que un día uno de ellos se estrella. Entonces nos echamos las manos a la cabeza.