La Voz de Galicia
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“Isla de Taquile, Lago Titicaca, Perú”

Por Fran Raposo

A unos cuarenta y cinco kilómetros de Puno, en pleno Lago Titicaca, se encuentra la isla de Taquile. Se visita después de ver las islas de los Uros. Distante más o menos a una hora de navegación por el lago, la isla con menos de seis kilómetros cuadrados tiene una población aproximada de dos mil doscientos habitantes. Está a una altura de 3.950 msnm y su punto más elevado cien metros más alto, superando los cuatro mil, 4.050 msnm.

No hay electricidad, no hay coches ni carreteras. Prácticamente son auto-suficientes. Creo recordar que solo el arroz les viene de fuera. El resto de los productos los plantan o los crían ellos. Tienen vacas, corderos, gallinas y el famoso cuy.

Fijaros en este anciano. Después de la comida hizo la misma subida que nosotros y nos pasó que parecía que iba en moto.

Llegamos al mediodía al extremo este de la isla a un minúsculo embarcadero. Nos dirigimos a una casa restaurante y los lugareños nos hicieron unos bailes típicos ataviados con sus vestimentas tradicionales muy coloridas.

Bailes típicos con música tocada con el Siku, el «tubo que da sonido».

Nos enseñaron como lavan la lana de oveja con una planta llamada Chukjo y después vimos como son los hombres los que hacen los tejidos con una especie de agujas de calcetar.

Los hombres tejiendo.

Entramos en el salón para comer y nos ponen unas tortas de maíz o trigo, no sé exactamente, pero recuerdo que estaban muy ricas. Para primero una sopa y de segundo o bien trucha fresca a la plancha o tortilla estilo francesa de verduras. Probé las dos y todo muy bueno. Al final infusiones variadas.

Después de la comida nuestro guía nos comunica que, debido al oleaje, nuestra lancha se ha tenido que marchar al otro lado de la isla para estar más protegida en el embarcadero principal.

Taquile también tiene un linda playa.

Debido a esto, tenemos que remontar hasta la parte más alta de la isla y luego caminar por un paseo hasta el otro embarcadero. Nuestro guía conoce perfectamente su trabajo y durante la ascensión de estos cien metros, cada poco  se para y nos explica algo. Estamos a casi cuatro mil metros de altura, después de comer cualquier mínimo esfuerzo se nota y no quiere que nos de el mal de altura. La vista desde este sitio es espectacular, se ve casi todo el lago incluso la parte boliviana.

Nuestra barca.

Nos comenta Roy, nuestro guía, que la sociedad de esta isla está basada en el trabajo colectivo y en el lema Inca: no robarás, no mentirás y no serás perezoso. Interesante ¿verdad?

Por Fran Raposo 

© Fotografías y vídeo propiedad de Fran Raposo. Prohibida su reproducción.