La Voz de Galicia
Políticamente, solo se puede ganar o morir
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Foto de Benito Ordóñez

Foto de Benito Ordóñez

Tras la remodelación del Gobierno (amplia y ¿tardía?). Los titulares de medios digitales coinciden en destacar el ascenso de Rubalcaba o el refuerzo de la posición de José Blanco, pero en las redes sociales triunfa Leire Pajín.

A sus 34 años la flamante ministra de Sanidad tiene una carrera política meteórica. Ha sido número tres del PSOE y en breve ostentará una cartera ministerial. No obstante, para seguir prosperando tiene un grave problema: la persona ha sido superada por el personaje. Y eso tiene su reflejo en Facebook y/o en Twitter, donde su caricatura es Trending Topic.

Solo hay que hacer un par de búsquedas para comprobar como uno de los temas del día es que la titular de Sanidad lleva una pulsera Power Balance. Y hay una legión de mensajes que dudan de su capacidad. Algunos de manera insultante.  Sin duda, va a ocupar el lugar de Bibiana Aido como diana preferida de los dardos contra el  Ejecutivo.

Haciendo un análisis serio y político, no faltan voces que opinan que su llegada al Gobierno es una patada para arriba, que le quitan el poder orgánico para darle un puesto con brillo, pero sujeto a la voluntad de Zapatero. Un secretario de Organización tiene fieles. Un ministro solo tiene una certeza: cuando lo cesan, el vacío se hace a su alrededor.

Según esta interpretación, Zapatero le ha pasado la minuta a Pajín por lo sucedido en las primarias de Madrid. La alicantina respaldó a Tomás Gómez y demostró al presidente de Gobierno que José Blanco llevaba razón cuando desaconsejó su nombramiento y propuso a Elena Valenciano. En política se perdonan los errores, pero no la infidelidad. Y menos por parte de quien veía acontecimientos planetarios allá donde pisaba su jefe.

La salida de Pajín y la remodelación del Gobierno tienen sus damnificados en Galicia. Por apuestas y por intereses. En el primer caso, algunos miembros de la dirección del PSdeG se habían aproximado sin mucho disimulo a la figura de la hasta ahora secretaria de Organización. En el segundo, la marcha de Elena Espinosa de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino cierra en principio una vía de salida hacia Madrid para el socialismo galaico.