1. Luis Pousa recopila en Farrapos de Gaita unos enlaces que ponen en evidencia las últimas decisiones y/o propuestas generadas en el ámbito de la Unión Europea. Móviles, blogs, emigración y jornada laboral conforman un poker controvertido. Dan ganas de gritar: ¡Viva la Europa de los ciudadanos!
2. Lois Blanco escribe en La Voz un más que interesante artículo de opinión sobre la directiva que permite mandar a campos de concentración (¿ por qué se emplea el eufemismo internamiento?) a inmigrantes sin papeles. Con retranca, incide en el cinismo de Europa. A este respecto, conviene recordar que los políticos no siempre actúan a espaldas de la sociedad. Más bien reflejan, casi siempre, lo peor de ella.
3. Y es que muchos ciudadanos respaldan la directiva emitida ayer. Creen que es posible dar una solución drástica e inmediata –¿expulsar 8 millones de personas?– a una situación, la presencia masiva de inmigrantes, que requiere políticas a largo plazo, varias reflexiones en voz alta y una conclusión inevitable: envejecemos, los necesitamos y tenemos que integrarlos. Ojo con los guetos y las exclusiones. A la larga se pagan. Muy caros.
Gracias por la cita, César. Yo creo que nuestros amigos los políticos y sus bien remunerados asesores sencillamente habitan en una dimensión paralela. Luego, estamos los ciudadanos, que como apunta Lois en su columna a menudo somos un poco cínicos, hipócritas y demagogos. Y con la suma de unos y otros, así nos va.
¿Qué Europa se puede construir con los Barroso, Solana, Leguina y Borrel?