INCREÍBLE JAPÓN, parte 5.
Por Fran Raposo
Delegado comercial de
Europamundo Vacaciones
Como os contaba ayer creo que podía estar dos meses contando las cosas que me han dejado asombrado en Japón.
Las compras.
Por supuesto que en Japón están establecidas todas las grandes tiendas de lujo. Pero como mi bolsillo no me permite no voy a hablar de este tipo de tiendas, ni siquiera de las más de ciento cincuenta tiendas que tiene mi conciudadano Amancio Ortega y su empresa Inditex en Japón.
Voy a comentaros otro tipo. Hay unos grandes almacenes que son como un todo a cien o un chino de los que ahora hay en todo el mundo. Los más famosos de Japón, curiosamente se llaman “Don Quijote” quien nos lo iba a decir, ¿verdad? Puedes encontrar de todo son como lo grandes almacenes más conocidos de España, pero con mucha incidencia además de los productos normales en cosas muy baratas inimaginables. No me extraña que algunos programas de televisión hagan algunas secciones con cosas que han comprado en Japón.
Por otro lado, además de los típicos suvenires que te puedes traer de Japón, si hay algo que realmente merece la pena comprar allí son los productos de cosmética. Sabéis que varias de las marcas más famosas de cremas son japonesas, no las voy a nombrar pero esta sí que es una compra que realmente vale la pena.
Si vas a comprarlas, te recomiendo sobre todo si eres como yo que no tengo ni idea, que busques antes de ir en internet. Que localices las segundas marcas de las más famosas y te lleves las fotografías como hice yo. Llevaba bien orientado de casa una lista con diez o doce productos. Entré en unos grandes almacenes y pregunté a un amable empleado y entre risas y después de enseñarle todas y cada una de las fotos me compre, al peso un par de kilos de cremas (manos, cara, cuerpo.), mascarillas, acondicionadores y de todo. Por el módico precio de menos de ciento veinte euros que para lo que cuestan aquí estos productos es una ganga.
Por cierto, que en la propia tienda, al ser extranjero te hacen ya la devolución del IVA presentando por supuesto el pasaporte y te grapan el justificante al mismo para que no tengas problemas en la aduana.
Otro de los productos, si como yo eres motero, que te interesarán y también son de los que valen la pena son los accesorios para la moto. Sabéis que las mejores fábricas de estos productos, que me perdonen los italianos, son japonesas. Yo compré en Daiba, la isla que está frente a la bahía de Tokio, en una tienda que recuerdo que se llama Ricoland Tokio Bay, un casco que me encargó mi sobrino, era el mismo que usaba Dani Pedrosa en las carreras de moto GP. Pues además de ahorrar los impuestos el precio era considerablemente inferior al de aquí. Creo que el ahorro pasó de los trescientos euros. Interesante ¿no?
El tren.
Si hay algo famoso en Japón que todo el mundo conoce o ha oído hablar es el “Tren Bala”, el Shinkasen. Aunque hoy en día ya hay trenes de alta velocidad en varios países del mundo, entre ellos el nuestro, este famoso tren se inauguró en Japón en el año 1964, hace más de cincuenta años, cuando aquí las carreteras estaban llenas de seat seiscientos. Permitidme que no hable de la Renfe de esos años, por favor. La primera línea fue entre Tokio y Osaka.
Hoy en día hay cientos de trenes de este estilo al día. Si te pones delante de una estación en veinte minutos pasarán seis o siete. Es el medio de transporte más usado en Japón y los turistas que van por su cuenta siempre llevan el Rail Pass, que te mite hacer varios tramos para moverte entre ciudades. Los viajeros de mi estilo, a los que nos gusta que todo vaya bien controlado y no nos arriesgamos a cualquier imprevisto, siempre optamos por un viaje organizado de la mano de un especialista en el destino como en este caso es Europamundo que no olvidemos que es propiedad del grupo JTB japonés una de las mayores empresas a nivel mundial de turismo, entre otros negocios.
Impresionante vista desde el Tren Bala.
Es un tren rápido, el trayecto que nosotros hicimos era de ochocientos kilómetros entre Hiroshima y Tokio, con paradas y todo nos llevó cuatro horas. Es cómodo, amplio y confortable. Pero lo mejor es que tuvo un retraso acumulado durante un año en el 2016 por ejemplo entre los ciento treinta mil trenes que solo llegó a veinticuatro segundos.
Otra de estas noticias que cuando la ves te impacta en comparación con lo de casa es que hace poco el director general de la compañía salió a pedir disculpas públicamente porque uno de sus trenes salió de las estación veinte segundos antes de la hora establecida. Un cliente reclamó e igualito que aquí, respuesta inmediata de la compañía. Jajaja.
Como consiguen esta extrema puntualidad pues por ejemplo, a los grupos no les dejan embarcar con maletas. Si vas tu solo o en pareja sí podrás llevarla pero no engrupo. ¿Cuál es el motivo? Pues que la puerta del tren se abre y a los noventa segundos se cierra, hayas o no montado. Si bien no hay problema en casos de individuales, nos podemos imaginar el tiempo que nos puede llegar a abordar un tren a un grupo de, por ejemplo treinta personas cada una con su maleta. Imposible.
Si vas a viajar en este medio de transporte la empresa que te lleva te mandará las maletas el día anterior por carretera y a tu llegada al hotel las tendrás en consigna.
El metro.
Como os comentaba en entradas anteriores dedicadas a Japón, Tokio es la ciudad más poblada del planeta, con sus casi treinta y seis millones de habitantes y como os comentaba al hablar del tráfico, tiene poco. ¿Cómo se consigue esto? Con los veinte millones de pasajeros al día que mueve el metro de Tokio.
Hay trece líneas distintas cada una con su color y a veces incluso hay varias empresas que coinciden en parte de los recorridos. Es muy fácil equivocarte y lo digo por experiencia. A pesar de haber ya experimentado el metro en París, Nueva York, Londres. Madrid, Bilbao o San Petersburgo, no es una cuestión fácil. Has de tener los cinco sentidos en marcha dentro de una estación de metro. Primero por los millones de personas que habitualmente circulan por sus estaciones, segundo porque a pesar de que ahora los nombres ya están con su nomenclatura en inglés hay como decía muchas líneas distintas. En una misma estación dependiendo de si sales por una puerta u otra llegarás a una zona del barrio distinta. Ya lo de sacar un billete es toda una experiencia.
Para que os hagáis una idea, en uno de los circuitos que tenemos en Europamundo, concretamente el que yo hice, el Contrastes de Japón con fin en Tokio, hace Hiroshima Tokio en tren y llega a la estación de Shinagawa. Pues bien, Europamundo pone a una persona para esperar a los clientes en la estación y salir por la puerta adecuada hacia el hotel que está cruzando la calle.
Alcantarilla de Hiroshima.
Las alcantarillas.
Este es un tema en el que podían tomar nota nuestros ayuntamientos. Hacer arte de una simple alcantarilla. En Japón se puso de moda y ahora los ayuntamientos compiten a ver cual hace las alcantarillas más bonitas. Esta de la foto, en concreto, es de Hiroshima.
Mi amigo Agustín señalando una botella que creo que terminó en A Coruña.
Las máquinas expendedoras. Jidohanbaiki.
Japón es el país del mundo con mayor número de máquinas expendedoras. Creo que rondan los dos millones y medio. En ellas hay básicamente bebidas, pero podrás encontrar casi de todo. Los japoneses llevan una vida muy ajetreada y sobre todo no les gusta perder el tiempo con esperas en las tiendas y restaurantes. Así que muchos al salir del trabajo al mediodía se compran la bebida y su comida caliente en una máquina y listo. Además tienen muy buenos precios. Podrás comprar en ellas desde café, hasta un paraguas, pasando por flores, pan, ramen. Etc…
Otro de los motivos es que cualquier residente permanente en la ciudad podrá tener su propia máquina expendedora. Se firma un contrato con la empresa que las lleva y listo, puedes tener un segundo ingreso además del de tu trabajo. Luego ya es como todo, la mejor localización y el mejor producto da más rendimiento.
Además el mantenimiento es constante y suelen tener una papelera junto a ellas que, como os contaba en una entrada anterior son las únicas que hay en toda la ciudad. Además han seguido funcionando en ocasiones durante algunos terremotos y su consumo eléctrico es muy bajo.
Yo compraba unas latas de café frio a las que me acostumbré puesto que estaba muy rico y a media mañana venía muy bien.
Ya como guinda del pastel, comentaros que, hasta hay una en lo alto del Monte Fuji, que creo que es de la bebida de Cola americana.
La seguridad.
Si hay un país seguro en el mundo ese es Japón. Nuestro guía Paco, que tiene ya tres hijos con su mujer japonesa me comentaba que, la sensación de dormir a pierna suelta aunque uno de sus hijos estuviese de “parranda” y regresase a casa a las cinco de la mañana, es impagable. Que no le daba miedo que su mujer volviese en plena madrugada del trabajo en alguna ocasión que tenía alguna reunión hasta altas horas. Exactamente igual que en las grandes ciudades occidentales.
En una de las visitas a pie por Tokio, la guía que nos acompañaba, llevaba una mochila en la espalda con el bolsillo abierto y con su móvil a la vista. Todos los que íbamos con ella en algún momento le avisamos “llevas la mochila abierta y se ve el móvil, te lo van a llevar”, ni caso nos hizo, nos decía: aquí nadie te roba…
Si estás en una terraza tomando algo y al marchar te olvidas un bolso en una de las sillas, al darte cuenta volverás a por él. Pues estará en donde lo has dejado o como mucho en manos del servicio de la cafetería.
Para que os hagáis una idea, existen unos locales en los que puedes dejar tu móvil, ordenador o Tablet para cargarlo, pues vuelves al par de horas y sigue en su sitio, increíble.
Otro ejemplo, en algunos aparcamientos de bicicletas de superficie, la mayoría de ellas están sin candado.
Una curiosidad, nunca había visto una manifestación de protesta de los policías. ¡A saber lo que reclamaban!
Fijaros, la foto es de antes de la pandemia y ya hay tres con mascarilla.
Las mascarillas.
Aunque ahora están muy de moda, que remedio, en todo el mundo, en los países asiáticos ya era muy habitual ver a la gente por la calle con su mascarilla puesta. Lo hacen por educación, cuando tienen catarro o gripe, lo llevan para no contagiar a los demás. Algún compañero de viaje se la trajo de recuerdo, las había de muchos colores y modelos.
También me han comentado que, como si te das de baja por enfermedad te lo sacan de las vacaciones, nadie se queda en casa sino está realmente muy malo y por eso llevan su mascarilla.
Los conductores de nuestros buses siempre llevaban mascarilla y guantes blancos.
Los Karaokes.
El concepto de karaoke en Japón es un poco diferente al nuestro. Aquí es un lugar en donde seleccionas la canción esperas tu turno y cuando te llega cantas para todo el mundo lo hagas bien o mal y todos te sufren o disfrutan. Normalmente suele ser bares o pubs.
En Japón es diferente, lo normal es que sean grandes edificios, identificados con letreros de neón. En la entrada verás una recepción casi como la de un hotel. Harás tu reserva, te preguntarán el número de personas y te asignarán una sala del tamaño adecuado.
Por eso algunos compañeros de viaje me comentaban: ¡vamos a un karaoke, que aquí en Japón son muy populares! Sí, lo son, pero solo verás y oirás cantar a los que estén contigo.
Eso sí, ay todo tipo de modernidades, efectos musicales, videos y sobre todo servicio para comidas y bebidas. Incluso existe la posibilidad de contratar la “barra libre” o nomihodai.
Los cafés de sirvientas.
Son muy populares en el barrio de Akihabara. Se llaman maid café y son unas cafeterías en las que las camareras son chicas vestidas con aspecto juvenil, con trajes de doncella, con sus enaguas, con sus volantes, sus cofias y las medias hasta las rodillas. Hay muchas chicas en la calle ofreciéndote los papelitos con los distintos locales.
En principio se crearon para los fans del manga y el anime muy popular en los video juegos, básicamente hombres, llamados otaku.
Al servirte la comida o bebida que te tomes en el café, las chicas te harán algún gestito o gracia. Si quieres una foto con ellas tendrás que pagar un extra y ya para rematar la “infantilada” con otro extra te harán un jueguecito estilo piedra, papel y tijera. La jugada puede salirte por encima de los treinta euros por cabeza.
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Bueno, aquí doy por terminada esta serie de “curiosidades de Japón” que he denominado Increíble Japón, realmente la mayoría de las cosas que os he contado las he escuchado a los guías de Europamundo, a mí me han chocado mucho y por eso he querido transmitirlas.
Lamento mucho se he sido un poco pesado pero os repito que esta semana debería haberla pasado en Japón y escribir todo esto me lo recuerda. Muchas gracias.
DOMO ARIGATO GOZAIMASU
Por Fran Kutsine
Delegado comercial de
Europamundo Vacaciones
© Fotografías propiedad de Fran Raposo. Prohibida su reproducción.