Soy un fanático de la composición. Son los efectos secundarios del geómetra. La simetría, el orden, la proporción Áurea y todas esas sutilezas me ponen. La foto de hoy, de Xoán Carlos Gil, es un prodigio de composición. Un barco de dos velas iguales, repetición. Un faro justo en el centro de la foto, eje. Dos lenguas de tierra a ambos lados de las velas, simetría. Sólo el barco de la derecha distorsiona ligeramente el conjunto. No entiendo como un barco puede equivocarse tanto.
Pues sí, la verdad apetece apuntar bien y sacarlo de ahí a cañonazos. Y ya puestos yo recortaría la montaña de la derecha con un laser de precisión simétrica.
Ya sabes que mi mente descansa con los vasos en formación…
Besos para el jefe