La Voz de Galicia
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Otro momento para la melancolía. Una foto de Martina Miser de uno de los alcaldes de los concellos que yo cubría. Se trata de un médico rural que escaló con autoridad a la alcaldía de Vilanova de Arousa. Supura elegancia por todos los poros. Solía pasearse con un Rolls Roice clásico, con toda la flema de un lord inglés, por las pistas de Caleiro, que es una pequeña parroquia de Vilanova. Sus dominios. Pero parece que esto no era suficiente y ahora le da por el noble arte de la cetrería, como un señor feudal contemporáneo. Tiene un explicación. La foto está tomada en una de esas absurdas ferias medievales que tanto proliferan hoy en día. O hay mucho medievalista o mucho apego a las cuchipandas sin sentido. Lo mejor de la foto, aparte de la indiscutible apostura del señor alcalde, es el paisano que hay detrás. No da crédito. Él representa una época que se acaba y el hombre que porta el halcón el afán de superación social. A la dignidad por el refinamiento. Casi nada.