Se supone que esta campaña de las municipales va a ser (una vez más) la de las redes sociales. Pero por ahora solo se repiten viejos clichés del pasado. La mayoría de los perfiles de los candidatos no son gestionados por ellos mismos, por lo que caen en la impostura. Y las posibilidades de comunicar e innovar se diluyen entre altas dosis de horterismo.
El karakoke, el chunda chunda y la coplilla (en sus peores versiones) son los géneros musicales por excelencia de la política hispana. Si en Spotify hicieramos una lista oficial no faltarían el reggaeton de Quintana, el pasodoble de Amilivia -ex alcalde de León- y -como hit recién llegado, la versión que el candidato del PP en Tarragona ha realizado de un tema de Lady Gaga. Él se llama Alejandro Fernández (no confundir con el cantante melódico mexicano de mismo nombre y apellido). Y su jingle, Ale Alejandro. Escuchad, valorad y, si os place, cantad:
http://www.youtube.com/watch?v=F7u3IoiGCPcSi no logra la notoriedad que busca con la cancioncilla de marras -que ha generado un torrente de comentarios desfavorables en la Red-, podría dar el siguiente paso, ponerse un traje de carne cruda. Así seguro que sería famoso.
Es un error usar una campaña musical como forma eslogan lleva al Batacazo. Gracias…