Uno se va de vacaciones y el mundo se vuelve patas arriba:
1. Estados Unidos empieza a poner fin a cincuenta años de bloqueo y adopta una política aperturista que va a ser muy eficaz para resquebrajar definitivamente la dictadura cubana.
2. Feijoo desveló finalmente su Gobierno: mucho segundo espada, varios independientes y dos superconselleiros: Agustín Hernández (asfalto, ladrillo y medio ambiente) y Javier Guerra (Industria y Economía).
3. Obama quiere inspirarse en el AVE Madrid-Sevilla para impulsar el transporte en Estados Unidos. Rápidamente han asomado unos cuantos espontáneos para ponerse la medalla y ofrecerse a asesorar a los yanquis (a lo Jose Mari en Georgetown, supongo). El primero, José Blanco; el segundo, Abel Caballero. A ambos habría que preguntarles por el estado de los trenes en Galicia. Antes y ahora. Quizá no tendrían tanta prisa por significarse. ¿Y si del podio pasaran a la picota?