El de Mos ha sido un pleno singular. No solo por la moción de censura que ha prosperado y que permite hacerse al PP con la alcaldía gracias a un tránsfuga. Sino también por su carácter pintoresco: la Rianxeira, bombas fétidas, porteros de discoteca… un ambiente digno de las mejores verbenas. Solo faltaba el ambigú. (Para los detalles, leed la excelente crónica de David Suárez, testigo directo de lo ocurrido).
Con menos material, en Estados Unidos harían una película. Eso sí, no sé quién la dirigiría mejor: Scorsese (una nueva Gangs of New York), Santiago Segura (con Torrente de jefe de los matones) o Luis García Berlanga (por aquello del reparto coral y la forma bufa de acercarse a algo muy serio y muy triste).
Sea quien sea, deberían incluir como personaje a Alberto Núñez Feijoo. Ahora le toca mover pieza y, si respeta el pacto antitransfuguismo, expulsar a todos sus concejales de Mos. Perdería una alcaldía de cierto nivel (Mos tiene unos 14.000 habitantes, y crece bastante). No le sobran. El concello con más población que gobierna el PP en Galicia es Ribeira.Veremos.