El último Consejo de Ministros del año 2011, ya presidido por Mariano RAJOY, acordó designar la pequeña localidad conquense de Villar de Cañas como el municipio que albergará el “almacén temporal centralizado” (ATC o almacén de residuos nucleares). Con esta decisión se ponía fin a un largo y conflictivo proceso en que se habían preseleccionado ocho lugares en toda España (Zarra en la Comunidad Valenciana, Ascó en la provincia de Tarragona, Yebra en Guadalajara…), todo ello con las correspondientes oposiciones vecinales y siempre, por supuesto, de los ecologistas. La implantación del ATC supondrá una inversión de 700 millones de euros y la creación de 300 puestos de trabajo durante los cinco años de construcción del complejo. Es lógico que la mayoría de los vecinos de pequeño municipio de Villar de Cañas, con su alcalde a la cabeza, han celebrado la decisión como si les hubiera tocado el “gordo” de Navidad. Pero muchos pensarán -con toda legitimidad- que ubicar tan peligrosos y duraderos residuos radiactivos es condenar al lugar elegido a ser el más indeseable de los basureros.
Hoy en día, cualquier instalación, actividad, proceso, etc. que puede entrañar algún tipo de peligro para las personas o para el medio ambiente es inmediatamente rechazado por gran parte de la ciudadanía. Da lo mismo que sea el citado ATC, una planta de tratamiento de residuos, una antena de telefonía móvil, etc. Para describir este fenómeno los anglosajones –que son muy dados a las siglas- inventaron el concepto NIMBY (“Non In My Back Yard”; que se puede traducir: “no en mi patio trasero”) o se versión castellanizada se cita el término SPAN (“Sí Pero Aquí No”). Me contaban los vecinos de Muxía que cuando, en aquel noviembre de 2002, vieron venir al buque Prestige ya “malherido” fue un clamor popular: ¡que se lo lleven inmediatamente de aquí! ¡xa!
Es natural, a nadie le puede extrañar esta reacción humana ante los potenciales peligros y, en particular, desde que, como magníficamente ha descrito Ulrich BECK en su libro “La sociedad de riesgo”, cada vez somos más conscientes de los riesgos que genera nuestra sofisticada sociedad tecnológica. Y en la medida que sabemos más cosas, más es nuestra “percepción social del riesgo”; si no la tenemos ya se encargará alguien de atemorizarnos. Y es que el sensacionalismo vende mucho.
Pues bien, resulta que estos días estamos experimentando el susodicho “efecto NIMBY” o “SPAN” en Galicia, desde que, a principios del mes de diciembre pasado, el Conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Agustín HERNÁNDEZ, anunció la ubicación de la planta de tratamiento de residuos del sur de Galicia (o también llamado “SOGAMA 2”) en el municipio ourensano de O Irixo. En efecto, en las últimas semanas se han sucedido varias manifestaciones convocadas en toda la comarca por la Coordinadora vecinal “Incineradora no Irixo, non”. Vecinos, políticos, ecologistas, artistas, incluso eclesiásticos, se han manifestado en contra de la programada instalación de gestión de residuos urbanos.
No es momento de entrar ahora a analizar si la “valorización energética de residuos” (“incineración” perfieren decir los ecologistas) que prevé el “Plan de Gestión de Residuos Urbanos de Galicia, 2010-2020” dentro del “complejo de tratamientos de residuos urbanos del sur” se adecúa mejor o peor a la normativa de residuos. Sí quiero adelantar que la gestión de los residuos en la Unión Europea se orienta bajo el principio de “corrección de los atentados al medio ambiente, preferentemente en la fuente” (art. 191,2 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea); lo cual se vincula con el principio de autosuficiencia y proximidad de la gestión de los residuos respecto de los lugares donde se genera. Por lo que sería manifiestamente injusto que los residuos que generamos en Galicia los llevemos a tratar a Castilla-León (por poner un ejemplo).
No dudo de que la Xunta de Galicia –y los responsables de la Consellería de Medio Ambiente- habrán meditado cuál es el lugar adecuado para instalar la “SOGAMA 2”. Ahora bien, lo que se deduce (puede ser que erróneamente) de la información periodística es que el lugar ha sido elegido por la empresa encargada de su construcción y gestión (la empresa Estela Eólica), que el Alcalde de O Irixo ya ha prometido muchos puestos de trabajo, etc. Lo que parece más criticable es que una decisión de tanta trascendencia –construcción de una instalación que acumulará cientos de miles de toneladas de residuos y que generará otros miles de escorias y cenizas- y con un indudable impacto ambiental, se merece seguir un serio procedimiento de autorización participativo y transparente para todos los afectados, que faciliten la obtención del consenso político y social necesario. Una planta de tratamiento de residuos (sin duda urgente y necesaria) cuyo emplazamiento debe decidirse teniendo en cuenta los aspectos técnicos, económicos y competenciales, pero sin relegar las muy atendibles consideraciones éticas, políticas y sociales.
No es lo mismo, pero nos consta que para la elección (discrecional) de la ubicación del ATC en Villar de Cañas, hubo que seguir, por exigencia legal, un riguroso proceso de selección.
Hola Francisco Javier:
Que hacer con el efecto NINBY? Pues yo casi podria decir que ya es casi imposible tratar de hacerse mala sangre, digo, los espanoles de la Peninsula, esto concerniente a los depositos de residuos radiactivos y plantas de manipulacion de residuos residenciales y en algunos casos, comerciales.
Bien, sobre esto ultimo y algo que ya he comentado en alguna otra ocasion, debo repetir que, si una de esas procesadoras de residuos es instalada con los combertidores cataliticos adecuados al caso,nunca sera perjudicial para el ambiente ecologico ni causara malos olores o contaminacion toxica que pueda perjudicar al ser humano/animal en su entorno, ni siquiera aun que haya viviendas en un radio de accion menor a 50m. de su localizacion.
Vivo en una localidad donde hay una muy cerquita de mi casa y esta lo que despide por sus chimineas las 24 horas del dia y la noche, que son cuatro, es vapor sin olor alguno a deshechos contaminados o, productos quimicos que puedan perjudicar el ambiente.
Estas nuevas plantas han sustituido a las antiguas que, estas si arrogaban contaminacion a la atmosfera y el olor que despedian se podia percibir en un radio mayor a cinco millas a la redonda de su base o localizacion.
Tenemos que tener en cuenta que, ya somos muchos los habitantes del planeta y por ende los residuos o desperdicios cada vez seran mayores cada dia, esto si no hay un control de natalidad unilateral. Yo creo que seria una buena idea que, a partir de ahora todas las viviendas que se construyan debieran tener incineradores propios y que cada familia se hiciera responsable de sus propios deshechos, aqui ya las hay.
Los residuos nucleares o radiactivos es otra historia muy diferente y es natural que nadie este de acuerdo en tener estos depositos en el (back yard de su casa). Ahora bien, lo que yo no alcanzo a comprender es la razon por la cual se quiere usar la energia solar cuando sabemos que el sol produce cantidad de radiacion y por otro lado todo aquello que sea operado mediante su energia de igual manera rebota en nuestro ambiente. Las placas receptoras de los rayos solares que son instaladas en los tejados o plataformas construidas en la propiedad del dueno de la casa, y las torres eolicas, estas tambien producen radiacion que se filtra en el ambiente en el que vivimos que, ya esta sobrecargado de ese efecto danino para la salud publica.
El reino animal de sangre caliente, desde el raton que es uno de los mas pequenos del reino hasta el mas grande que es el elefante todos en conjunto producimos cantidad de toleladas diarias de acido sulfurico que es lanzado a la atmosfera y obviamente produce efecto invernadero, y por tanto aun que no queramos entenderlo de alguna manera somos participes del calentamiento global.
Las grandes lineas de alta tension, grandes empresas, hospitales, clinicas de diagnosticos, suma y sigue, vienen siendo fuentes de radiacion continua que se filtra cada dia en nuestro ambiente. Pues bien, estimado Francisco Javier, como podemos ver, vivimos en una era tecnologica que no es aprovechada adecuadamente para el bienestar humano, la usamos indiscriminadamente y hasta superfluamente como diversion, nunca para mejorar todo aquello que pudiera favorecer nuestro ambiente y bienestar social, por que? Pues porque el dinero se gasta en cosas innecesarias que, en muchos casos no necesitamos.
Parte del mundo esta en crisis y no se puede solventar, nadie tiene la vara magica para poner las cosas en su lugar. Europa esta en via de desintegracion. Alemania, Francia y Bruselas mandan y dictan sobre los otros paises europeos del grupo 27… Se construyen vias rapidas de transporte, se construyen campos de golf sin darnos cuenta de que esos lugares son un desperdicio de agua potable, liquido importante y necesario para la vida que, ya esta en via de extincion igual que el petroleo.
Admiro tu sabiduria e interes ambiental, pero debo decirte y muy lamentablemente que, son muy pocos los gobiernos que le ponen interes a todo esto y si lo hacen lo hacen al por menor, por tanto nosotros lamentablemente no podemos hacer otra cosa que no sea preocuparnos por lo que se esta haciendo y lo peor es que no se hace porque no se pueda, sino porque no se quiere hacer. Yo estoy en el limite de mi vida, pero no dejo de lamentarme por lo que se le espera a mis nietos y bisnietos, porque sinceramente no sera nada agradable.
Un saludo.
Eduardo
Gracias Francisco Javier.
Lastima que el mundo este en decadencia irreversible y que sea la propia mano del hombre la culpable de todo ello. Muy, muy lamentable.
Desgraciadamente ya no existen en el mundo politicos con el cerebro bien plantado, sino marionetas que son manejados por un sistema capitalista que esta contaminado. Gracias y que tengas un buen dia. Eduardo