Cuando ya julio empieza a decir adiós (a pesar de que el verano no acaba de llegar), uno de los blogs que más comentarios ha suscitado en este mes también concluirá uno de sus proyectos.
Lorenzo es un joven de Ciudad Real de 31 años que comanda la bitácora Altermundista.miciudadreal.es desde la que narra, con todo tipo de detalles, un particular experimento que, sin duda, servirá de ejemplo a más de uno. Antes de nada, puntualizar que el término altermundista puede servir de sinónimo de lo que la prensa ha denominado movimiento antiglobalización, lo que nos sirve para encuadrar este diario digital dentro del ideal del activismo social y el compromiso.
En este caso, se trataría de un compromiso con el medio ambiente, con los recursos naturales que nos rodean –los cuales deberíamos economizar más- y con el «decrecimiento» sostenible (como prefiere llamarlo el autor del blog).
Pues bien, el objetivo que se propuso Lorenzo fue el de intentar minimizar al máximo el gasto de agua hasta alcanzar los 75 litros diarios. Según las cifras que maneja, un ciudadrealeño consume entre 175 y 200 litros diarios, pudiéndose elevar esta media hasta los 300 litros en el global de la Unión Europea.
En su caso, el reto es doble al implicar a una segunda persona. Y es que él vive junto a su pareja en un piso de 65 metros cuadrados, especificando, además, que se duchan una vez al día, que ponen una lavadora semanal y que no tienen lavavajillas.
Jornada tras jornada, y desde el 1 de julio, el protagonista relata los avances y problemas con los que se topa diariamente y a los que intenta hacer frente con una gran disciplina personal. Entre su metodología está la de ducharse en tres minutos, la de hacerlo con el tapón puesto para conservar ese agua y después usarla para rellenar la cisterna, la de lavar los platos con un chorrito pero que, eso sí, debe estar muy caliente, o la de utilizar únicamente un vaso para cepillarse los dientes.
A día 29 de julio parece que el objetivo ya se ha cumplido y hubo jornadas en las que la pareja incluso llegó a gastar solamente 30 litros por persona. ¿Hazaña o rutina? Sus post apuntan a lo segundo. Y es que a través de su lectura uno se da cuenta de que es más fácil de lo previsto y que repetir su «hazaña» está al alcance de cualquiera. Solamente, hay que proponérselo.