La Voz de Galicia
Seleccionar página

lapesca

Mi padre era pescador de río. Un gran pescador de truchas. Mis hermanos y yo nos ocupábamos de cazar saltamontes en los prados cerca de casa, para armar su caña de cebo vivo. Ocupábamos un peldaño inferior en la pirámide alimenticia. Cuando en vacaciones viajábamos en coche por ahí, mi padre siempre paraba cerca de  los ríos. Entonces se asomaba al pretil y observaba el cauce para avistar ejemplares. Nunca entendimos cómo era capaz de pasarse las horas asomado al río. Sin duda había algo filosófico en ello.  Pero nosotros no lo apreciábamos.  Sólo nos aburríamos dentro del coche.
Ahora me gustaría saber pescar (y pensar) como lo hacía él. Muchas veces paro mi coche y me asomo al pretil. Pero no veo nada.
Viendo esta foto de Marcos Míguez una catarata de recuerdos me sobreviene. Cuando una foto desencadena todo esto, entonces debe ser que es buena.