El iPad Air es para mi gusto la tableta más atractiva que existe en la actualidad en el mercado. Es coherente en su hardware y Apple ha sabido adaptar el nuevo iOS 7 a este hardware tan potente o quizá al revés, nunca lo sabremos; si le añadimos las fabulosas apps que los desarrolladores nos han ido aportando estos años, el conjunto es una herramienta perfecta para la movilidad. El ordenador portátil es el nuevo «fijo», ahora lo realmente portátil está representado por las tabletas y en este sector el iPad es la mejor de ellas. Ya que lo considero una pequeña joya, como tal he decidido tratarla y me he decidido a hacerme con una funda especial: la Smart Case de Apple en color marrón, que me ha enamorado a simple vista.

Apple presentó la primera Smart Case en la WWDC de junio de 2012 sin grandes aspavientos; ya había presentado previamente la Smart Cover para el iPad 2 y esta vez aportaba una funda completa para los que también querían proteger de golpes y arañazos la parte trasera de su dispositivo. En la edición de 2013 han decidido que la Smart Case sería para los que pagasen un precio elevado por ella, nada menos que 79€. Reconozco que es una pieza de piel de una calidad muy elevada y que quizá por estar realizada en una única pieza su precio tenga que incrementarse. Al tacto ofrece calidad, mucha calidad, pero el precio significa un extra realmente importante frente al precio mínimo de un iPad Air (479€).

El cambio fundamental a nivel estético respecto a anteriores Smart Case es que en la parte frontal han decidido  incluir tan solo tres elementos con dos pliegues entre ellos, en lugar de los cuatro elementos y tres pliegues anteriores. Esto significa que vas a poder poner el iPad en apaisado y soportado por la funda sobre una base de mayor superficie que en el anterior modelo. Esto es bueno, sin duda, lo que me gusta menos es que si quieres poner la tableta ligeramente elevada la posición hace que la funda quede para mi gusto colgada en exceso del «triángulo» que la soporta.

La cobertura de los botones de volumen y de encendido/apagado es excepcional. Se trata de un simple abultamiento que los protege y que a pesar de ocultarlos totalmente son muy sensibles y no dificultan para nada el funcionamiento de los botones. La apertura para el botón deslizante de bloqueo de pantalla o sonido en el lateral  no es cómoda en absoluto y me cuesta bastante ejecutar la pulsación del mismo. Lo que más me gusta es que la cámara va realmente bien protegida por el grosor de la funda, aunque como muchos habréis notado, en el iPad Air se ha mantenido el aro metálico que rodea al cristal que cubre la lente, elemento que han retirado en el iPhone 5S y me parece más acertado.

En la parte superior trasera se ubican los orificios necesarios para que el par de micrófonos sigan funcionando perfectamente y se encarguen de que el ruido ambiente no te moleste al hablar con Siri o al dejar alguna nota de voz. El funcionamiento es espectacular, se ve que lo han trabajado a conciencia. En otros modelos anteriores el micrófono no funcionaba tan bien.

En la parte superior también está ubicado el conector Jack y en el lateral está la bisagra que también es otra muestra de diseño de la funda. El cierre gracias a esta bisagra de piel es perfecto y solo se nota una mínima holgura que es necesaria para poder replegar la solapa delantera hacia atrás. Los acabados me han sorprendido, sobre todo por las experiencias tan malas que había leído con las fundas de los iPhone 5S. Al parecer la piel es totalmente diferente.

La solapa delantera encaja a la perfección sobre el borde de piel que hace de marco alrededor de la pantalla. Es una funda que si bien aporta un ligero grosor a un producto tan bien diseñado como el iPad Air también asegura la protección total del dispositivo. Algunos decidirán apostar por llevarlo a pelo y otros proteger esta pequeña joya, que por cierto encaja tan perfectamente en la funda que sacarla no es una tarea sencilla.

El interior de la funda es de piel vista y aunque esperaba que hubiesen trabajado para que no quedasen marcas sobre la pantalla, como con las Smart Cover que tengo, sigue siendo un problema y sobre todo algo que detesto. El imán de la funda por otra parte es suficiente para utilizar como tapa, pero no está pensado para que al replegar hacia atrás se quede pegada en la parte trasera, algo que sería realmente útil; solo haría falta un imán un poco más potente.

En la parte inferior se encuentran los altavoces del iPad Air y en la funda han replicado los 40 orificios disponibles por cada uno para garantizar la fidelidad del sonido. Lo han conseguido y además estéticamente es uno de los signos que identifican el producto, recordando mucho al iPhone 5 o 5S en esta parte. En el medio está el conector Lightning que con algo tan sencillo como un sencillo aro metálico elimina la sensación horrible que ofrecen algunos dispositivos con microUSB al presentar el puerto sin una mínima «puerta de entrada».

Por último también me gustaría destacar un detalle de los que no se ven que está justo en el interior donde reposa el iPad Air. Se trata de un grabado en piel que se encarga de recordar que el diseño de la funda está hecho en California, bajo el mando de Jony Ive, pero que el montaje se lleva a la China, cosa que puede dar para un buen debate.

Todas las fotos han sido tomadas con el iPhone 5S y no han sido editadas, tan solo ajustadas en tamaño. Espero que mis impresiones de la funda ayuden a los que tienen dudas sobre si merece la pena la inversión. Por mi parte, es una buena compra por la calidad del producto y la seguridad que ofrece para el iPad Air, pero el precio me parece excesivo.

Saludos
David Serantes