Con esta frase y con la contundente palabra de thrive (que se podría traducir como crecer o prosperar) termina uno de los vídeos que últimamente más circulan entre aquellos profesionales de los medios de comunicación relacionados con el ámbito digital.
Hank Wilson ha logrado sintetizar en dos minutos los cambios que ha dado la profesión desde sus primeros años hasta el siglo XXI, intentando reflejar tanto la evolución en la forma de captar las noticias como la manera de narrarlas, sin dejarse en el «tintero» virtual el hecho de que, en la actualidad, Internet no solo puede ser un complemento de las redacciones. El autor de la grabación también avanza las habilidades que deben tener los protagonistas de esta era del periodismo y deja entrever un claro aviso a través de thrive. La palabra crecer no hace mención a la edad. Y es que, el problema no está en la juventud o madurez del periodista, si no en su actitud y aceptación de los cambios que se avecinan.

Pero para que no se me echen encima los periodistas de la antigua escuela y para fomentar mi propia nostalgia, incluyo también un minirreportaje cinematográfico de 10 minutos dirigido a los estudiantes y que muestra cómo era la profesión en los años 40 del siglo XX. El vídeo se presenta como un valioso documento para conocer cómo era el trabajo pero, eso sí, incluye una frase con la que no estoy de acuerdo: esa que reza que el perfil del nuevo periodista es el de un joven varón. El tiempo le ha quitado la razón.